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ALEJANDRO DE VILLALMONTE 53 fórm ulas de nuestra teolog ía actual cabría d e c ir : D io s destina a tod o hom b re a la v ida eterna, a la participación de la v ida intratrinitaria, y cu ida de él con p rov id en cia sobrenatural en orden a este fin , ya des de la primera aparición del h om b re en la tierra. C ua lqu ier otra p reci sión sobre la fo rm a con creta de adm inistrar D io s la gracia a la hum a n idad originaria está fuera de la in ten ción d o cen te de G én 2 - 3 . B. ¿H a b la el N u e v o i estam en to d el estado d e justicia o rig i nal? Los teólog os m an tenedores d e la teoría tradicional ya n o adu cían, en los ú ltim os años, n in gún tex to con cre to del N . T . qu e crey e sen dem ostra tivo a este respecto. El ún ico autor del N . T . qu e utiliza la teolog ía de A d á n , de los dos A dan e s, es Pab lo. Pero Pab lo, e lim i n ando otros aspectos de la teología rabínica o gnóstica en este aspecto, a tribuye ex clu sivam en te a C risto las cualidades del A d á n verdadero, p erfecto, n u e v o , espiritual. S in duda qu e con o ce al A d á n de G én . 2 - 3 ,* pero sólo y siempre com o pecador y causante de la muerte, nunca com o in ocen te, am igo de D io s, en estado paradisíaco. Puede adm itir se qu e c o n o c ió la figura d el A d á n in o c e n te ; pero ciertam en te n o ha bla nun ca d e él en este sen tido n. N o se pu ede recurrir al razonam ien to de qu e un pecado cua lifi cado (el originan te) presupone la posesión previa por A d á n d e la san tidad y justicia cualificada. C iertam en te Pablo n o hace este razona m ien to. A parte de qu e es p o co segura la afirmación d e qu e Pablo atribuya a A d á n un p ecado cua lificado, causante y orig inan te d e la situación pecadora de toda la hum an idad 72. U n argum en to más fu erte se cree en con trar en la idea reiterada, se d ice, en el N . T ., de qu e C risto v in o a restaurar y restituir al h om bre a su prístino estado. La acción de C risto tendría un radical y p ri m ord ia l carácter de reden ción y re-instauración de la situación sobre natural perdida por el p ecado orig inan te de A d á n . La teolog ía patrís- 71. Pablo habla de Adán en Rm 5, 12-21; 1 Cor 15, 21-22. 45-48; 1 Tim 2, 13-14. Estudios sobre este tema paulino se encuentran más adelan te en la nt. 83. 72. Ver la reciente y acertada interpretación de S. GONZALEZ DE CARREA El pecado original en Rm 5,12-21: “Naturaleza y Gracia” 17 (1970) 3-31. También publicado en X X IX Semana Española de Teología (sept 1969), Madrid 19, pp
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