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A. PINTOR - RAMOS 375 década más tarde a través de un intenso trabajo de reflexión personal, similar al que llevó a cabo Bergson con Spencer. Para entender a H u s­ serl es necesario tener presente su formación matemática y el hecho de no haber encontrado una solución satisfactoria en la filosofía en ­ tonces reinante, lo que le obligó a emprender un largo camino en so­ litario, en el que fue en gran parte un autodidacta que se iba haciendo cargo de los problemas a medida que iban surgiendo en su camino con una fidelidad excepcional a sí mismo y a su empresa. Algunos de sus discípulos fueron en este sentido un poco precipitados. Mucho es lo que debe Husserl a Bren taño y a las direcciones influidas por éste y él ha reconcido repetidas veces su deuda con el maestro austríaco 16, pe­ ro la fenomenología sólo fue posible en el momoento en que Husserl llevó los conceptos y problemas heredados de Brentano por un camino nuevo y distinto al que seguía su maestro. i. El ideal de Husserl es la constitución de una nueva idea de filo­ sofía en la que ésta responda por fin al ideal de una «ciencia riguro­ sa» 1?. Que a Husserl en esta tarea las matemáticas le hayan servido de modelo, es algo que parece indudable. No es que la filosofía no sea una ciencia acabada — eso no lo es ninguna— sino que, usando de una expresión kantiana, no ha entrado aún «en el regio camino de las ciencias»; la postura de Husserl es bien clara; «En ninguna épo­ ca de su desarrollo la filosofía ha podido satisfacer esa pretensión de ser una ciencia rigurosa; tampoco en el período moderno que, con toda la diversidad de sus orientaciones, sigue desde el Renacimiento a nuestros días una marcha esencialmente unificada» M. Esto se ha intentado en numerosas épocas, pero de un modo equivocado. La constitución de la fenomenología como la entiende Husserl exige en principio alejarse de todo naturalismo que pretende hacer de la filosofía una ciencia estricta negando su especificicidad y 16. Cf. sobre todo, HUSSERL, E., Erinnerung an Franz Brentano, en KRAUS, O.. Franz Bren­ tano. Beck, München 1919, pp. 153-157. 17. Die Philosophie als strenge Wissenschaft, el célebre artículo programático de Logos, 1 (1910/11) 289-314. Usaremos la siguiente ed.: La philosophie comme science rigoureuse. Introd. trad. et commentaire par Q. Lauer. PUF, Paris 1954. Otro texto en el mismo sentido al comienzo del Nachwort zu meinen Ideen, un texto de 1930, recogido por M. Biemel en su ed. de Ideen III. "Hus- serliana”, VI 1952. Tomada como "Leit-motiv" por COSTA. F., La filosofía come scienza rigorosa (Saggio su Husserl). Silva. Milamo 1961. 18. La philosophie comme science rigoureuse, p. 51.

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