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Religación y Psicología Profunda El concepto de religación es, en el preciso sentido con que Zubi- n dotó a este vocablo, rigurosamente metafísico. La religación es una actitud radical del hombre ante la realidad de la cosas; pero no en virtud de su individual carácter de tales cosas, sino por su genérico trasfondo de realidad; no se refiere a las cosas en cuanto tales, sino a la realidad como estructura transcendental. He aquí el sentido último y metafísico de la religación, y sin duda también el más importante; pero no el único. Si la religación se define como la actitud radical del hombre \ ha de ser susceptible de las convergentes consideraciones que sobre todas y cada una de las actitudes humanas realizan las diferentes ciencias que tienen al hombre por su objeto material. Es decir, la religación es susceptible de un tratamiento antropológico sistemático y coherente, en el que el aspecto metafísico poseerá su debido lugar, pero donde cabrán otras perspectivas, no por más humildes menos interesentes. Una de estas perspectivas es la psicología, y más concretamente la de la Psicología profunda. Laín Entralgo, promotor y continuo incitador de la Antropolo- gía en España, ha delineado algunas de las ideas maestras de este tema, así como de otros afines, cuales son el de la esperanza y la pro- jimidad 2. La espera y la esperanza y Teoría y realidad del otro, son 1. Cf. E L L A C U R IA , I., «La religación, actitud radical del hombre. Apuntes para un estudio de la Antropología de Zubiri», Asclepio, X V I, 1964, 97-156. La defi­ nición de «actitud» en la pág. 125. E n este magnífico artículo, como en los demás de Ellacuria («L a Antropolo­ gía de Xavier Zub iri», Revista de Psiquiatría y Psicología Médica, V I, 1964, 6, 403- 430 y 7, 483-508; «La idea de filosofía en Xavier Zub iri», en el libro Homenaje a Xa­ vier Zubiri, Madrid 1970, t. I , pp. 459-523), encontrará el lector las más precisas y autorizadas exposiciones del pensamiento de X . Zubiri. 2. E n La espera y la esperanza (M adrid 1958, p. 280), Laín ha escrito: «E n su