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3 0 0 EL XIV CONGRESO INTERNACIONAL DE FILOSOFIA mité ejecutivo queremos recoger el de F rancisco L arroyo , quien en un vibrante español — pese a haber sido excluido com o lengua ofi­ cial— afirma que la filosofía es una llamada a las íntimas raíces de lo humano. Y ella va debelando su destino al intentar, con estos diálo­ gos de pensadores, abrir nuevas vías para una m ejor intercomunica­ ción de los hombres y de los pueblos. A continuación hablaron los m iembros del Comité de honor, responsables de la vida política de Viena y de Austria. Primera­ mente, lo hizo el alcalde de la ciudad, Bruno Marek, quien, después de dar la bienvenida — w illk om m en — a todos los forasteros, acentuó la larga tradición de Viena com o ciudad de encuentros y de con ­ gresos. No es sólo la ciudad del teatro y de la música, d ijo, sino también centro de diversas corrientes filosóficas del pensamiento actual. Tanto el psicoanálisis com o el mundialmente conocido com o W ien e r K r e is son direcciones doctrinales de alta significación en el presente. El ministro de Instrucción Pública, T h . P iffl -P ercevic , subrayó la importancia de la filosofía en la formación del hombre de hoy. La filosofía está llamada a investigar sobre el sentido de las diversas zonas de la humana existencia y reflexionar sobre los problemas de la convivencia social. Para ello la filosofía necesita del diálogo libre y abierto al co loqu io y a la discusión. Toca a Austria proporcionar el clima para este diálogo en el actual Congreso Internacional. El Canciller, J. K laus, resaltó la significación de Austria en este momento de acercamiento de pueblos y culturas. Dada su situación geopolítica y su larga tradición filosófica, su misión consiste en ayudar a este amanecer de vida unitaria que se vislumbra y se desea. El destino de Europa, y aun el de toda la humanidad, dependerá del éxito en este cam ino de unidad. Esta unidad la debe sentir sobre todo Europa, cuya misión en el momento presente consiste en su­ perar las tensiones actuales con una nueva visión de la unidad. Esta no se obtendrá por los caminos del tota litarism o, del u n ifo rm ism o o del p rim itivism o , sino por la integración mutua de las culturas. Ya desde la época romana, Austria es centro de atracción para pueblos y culturas. Ha cultivado siempre, a través de los siglos, una existencia integrativa e integradora. Este es su clima, admira­ blemente expresado en el lema de Nicolás de Cusa: «C oinciden tia o p p o s ito rum » . A lo largo del Congreso toca a la filosofía dar su aportación a estos anhelos humanos. Austria le ofrece un ambiente cálido de acogida y comprensión. A continuación, el Cardenal de Viena, F ranz K óning , quiso hacer ver la necesidad de la con junción de la fe y de la razón en este