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212 FENOMENOLOGIA Y GNOSEOLOGIA, SEGUN MAX SCHELER dado al percibir sentimental— puede ser y tener validez «a priori». También habría que distinguir el «hecho del a priori» de cual­ quier tentativa para explicarlo o hacerlo comprensible. Scheler critica a Kant por haber reducido el «a priori» a una actividad espontánea de los elementos caóticos de la sensibilidad por parte de la razón; su postura es enérgica: «la m ito lo g ía de una actividad productora por parte del en­ tendimiento no tiene en absoluto nada que ver con el aprio- rismo» 53, subrayando que Kant cae en el error del sensualismo, el error de suponer que todo lo dado es un caos informe: «la naturaleza como la entiende Hume necesita de un enten­ dimiento de tipo kantiano; el hombre de Hobbes necesita de una razón práctica del tipo de la kantiana» 54. Pero ambas necesidades desaparecen ante un análisis fenomeno- lógico más profundo que pone de relieve la inconsistencia del error de base; Kant ha teorizado movido por motivos personales; re­ curriendo a los estudios de sociología de la religión de Max Weber, Scheler culpa a Kant de pensar sobre la base de una Weltanschauung típica del protestantismo, con una actitud básica de hostilidad y odio al mundo que él ve como un típico producto del resentimiento del moderno hombre burgués. Esta crítica, además, es curiosa, porque Martin Buber, el famoso filósofo judío amigo de Scheler, hará a nuestro filósofo una crítica muy similar 55. Después de todo, la concepción transcendental del «a priori» le merece a Scheler todos los respetos; pero pierde los estribos y tiene frases muy duras, en cambio, para la concepción subjetivista y psicologista del «a priori» que intenta reducirlo a los actos me­ diante los cuales el sujeto llega a conocerlo. El problema del origen del conocimiento, aún reconociendo su legitimidad e importancia, no puede pasar nunca de un capítulo que nunca será capaz de explicar absolutamente tal conocimiento 56. Los dardos de Scheler apuntan de nuevo al filósofo de Königsberg tachándolo de subje- 53. Ib., p. 86 . El subrayado es m ío. 54. Ib. 55. B u b e r , M., ¿Qué es el hombre ? Trad. de E. Imaz. 5 ed. Fondo de Cultura Económ ica, México, 1964, pp. 114-140. 56. Der Formalismus, p. 93.

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