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336 S E N T ID O S O C IA L D E L A "P O P U LO R U M P R O G R E S S IO " Y el Papa com para esta m iseria de con tinen tes en teros con la ri­ queza de una m ino ría que nunca ha sabido lo que es necesitar; con los derroches y gastos inú tiles individuales y nacionales. Y, fren te a este inmenso p rob lem a común, busca una solución. Pero comprende que ésta llevará consigo enorm es complicaciones. Difí­ cil, pero es preciso in ten ta rla p a ra com ba tir y vencer las in ju s ti­ cias de la situación p resen te 3. La hum an idad aparece, a través de la encíclica, dividida en dos mundos: el desarro llado , y el subdesarro llado . El mundo de la r i­ queza, y el de la m iseria. El mundo de los señores del dinero, del lujo, del desp ilfarro , y el mundo de los que angustiadam en te luchan po r en con tra r condiciones más hum anas de vida. El Papa a firm a que la acción realizada h a sta aho ra, po r circunstancias de carac­ terísticas d iversas, no ha sido capaz de a cab a r con esa división de los dos mundos. Y cada día se acrecien ta e sta desigualdad. Y los pueblos ricos se enriquecen más, y los pob res se hacen más pob res 4. Pablo VI denuncia que la industrialización y el trab a jo , factores im po rtan tes y decisivos del desarro llo , se han acompañado de sis­ tem as no sólo ineficaces, sino perjud iciales al verdadero desarro llo , po r cuan to se han apoyado en princip ios que no conducen al ser­ vicio del hombre, sino al servicio de in tereses pa rticu la res; que no buscan la perfección del hom b re en todos sus valores, sino so lam en te aspectos de su personalidad , mu tilándo lo en perspectivas trascenden tales 5. Po r esto, el R. Pontífice destaca que los sistemas h a s ta hoy en uso no son capaces de sup rim ir las desigualdades, ni sirven p a ra el desarro llo que u rgen tem en te p recisa el mundo, y reclam a refo rm as urgen tes, transfo rm ac iones audaces y p ro fund a ­ m en te renovado ras 6. UN EJEM PLO . P a ra fo rm a rno s una idea de la comp lejidad de estos p rob lem as y sus soluciones, que exigen, según el Papa, tales transfo rm aciones, se rá opo rtuno echar una o jeada a de te rm inada situación del mun­ do de hoy. Veamos a g randes rasgos lo que ocu rre en América Latina. 3. P. Progressio, n. 32. 4. Ibidem, n. 8. 5. Ibidem, nn. 16 y 24. 6 . Ibidem, n. 32.