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A l e j a n d r o d e v i l l a l m o n t e 2 2 7 universo entero es instrumento, a la vez que disposición para la reve­ lación de Cristo. La creación es el comienzo de la Historia de salva­ ción que culmina en Cristo. En su funcionalidad religiosa la creación entera-cosmos, hombres, espíritus— son como el campo de operación, los testigos, portadores y realizadores de la revelación del Misterio de Cristo. b) Más en particular 1a. Historia Sagrada del A. Testamento es la preparación y revelación incoada del Misterio de Cristo, por medio de los profetas inspirados por el Espíritu. c) El Misterio' entra en su frase de revelación definitiva, escato­ lògica con la muerte y resurrección de Jesús (con su ser, s¡u acción redentora) consideradas por Pablo como síntesis de todo el ser-acción histórica y redentora de Cristo y de Dios en Cristo. d) La revelación del Misterio de la voluntad de Dios en Cristo, se continúa por el «ministerio» de Pablo, pregonero del Misterio. Esta función kerigmática de Pablo (de la Iglesia) es parte esencial del Mis­ terio en su realidad objetiva. La vida entera de la Iglesia es la conti­ nuación de Misterio que sigue haciéndose, por el hecho de que Cristo crece y echa cuerpo en la Iglesia: a ’} Cristo'está presente en 1a, procla­ mación de la Palabra de reconciliación, b’) Está presenta en la cele­ bración el culto, especialmente en el bautismo y en la Cena, c’) El tes­ timonio de la vida cristiana, su vivir en la caridad es simultáneamente la fuerza impulsiva, el centro y el sentido último del nuevo vivir del hombre que ha sido incorporado al Misterio de Cristo 9. 3. R e v e la c ión d e fin itiv a del M is te rio de C risto . Tal revelación tendrá lugar en la segunda Venida del Señor. Mien­ tras tanto la Iglesia entera y cada hombre camina hacia esa revela­ ción última: a) A l cumplirse las ultimidades de cada hombre con su muerte, el juicio de Dios y el destino eterno al lado de Cristo, o lejos de Cristo. 9. L a fu n c ió n k e r ig m á t ic a e s p a r t e in t e g r a n t e , c o n s t it u t iv a d e l M is te r io d e C r is t o e n c u a n t o c o n t in u a d o e n l a I g le s ia . L a I g le s ia es la. p r o lo n g a c ió n ó n t ic a d e l M is t e r io d e C risto-, e s C r is t o o p e r a n t e y p r e s e n t e e n e l m un do*. L a I g le s ia p r o c la m a p a r a c o n t in u a r lo y lo c o n t in ú a p r o c la m á n d o lo el M is t e r io d e C r is t o p o r m e d io d e la P a la b r a y d e l a a c c ió n s a c r a m e n t a l, p o r l a f e y l a c a r id a d d e lo s c r e y e n te s . P a b lo , c o m o p r e g o n e r o d e l M is te r io , v a le c o m o p r o to t ip o d e t o d a a c c ió n e d e s ia l, q u e s e c o m ie n z a y s e m a n t ie n e so b r e la fu n c ió n k e r ig m á tic a . C fr . A . de V illal ­ monte , La teología de la predicación según san Pablo, e n NaturGrac. 12 (1965) 26-36.

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