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B U E N A V E N T U R A D E C A R R O C E R A 2 4 9 antes de 1936. Las mismas que, para continuar en linea siempre más alta ese movimiento, se han multiplicado y desplegado, a partir de 1939, en todas direcciones y en todos los ambientes con mucha ma­ yor amplitud, eficacia y éxito a través de las revistas de matiz divul­ gador y popular ya citadas y de otras incontables, así como por medio de las Obras Misionales Pontificias y de la Unión Misional del Clero. No es nuestro intento ni hacer balances ni consignar estadísticas; bastan las indicaciones hechas, puesto que el propósito y el objetivo primordiales de nuestro trabajo se centran, sobre todo, en la Misiono- logia como ciencia y en cuanto con ella tiene conexión más inmediata. Sin embargo, no queremos cerrar este apartado sin hacer mención del Consejo Superior de Misiones, cuyas actividades misionales son bien notorias. Es «un organismo autónomo, creado y sostenido por el Estado para dispensar protección y ayuda especiales a los súbditos españoles, que en el extranjero, al difundir la fe de Cristo, realizan el más alto destino de España» 4. El Consejo Superior de Misiones depende del Ministerio de Asuntos Exteriores y fue creado por decreto del 5 de marzo de 1940. Su finali­ dad es dar unidad y, al mismo tiempo, protección a todos los religio­ sos y religiosas españoles que viven en el extranjero y que desarrollan labor evangelizadora, cultural o científica e incluso ayudarles econó­ micamente. Es asimismo incumbencia suya recoger datos sobre mi­ siones y misioneros, incrementar la propaganda misional, celebrar los acontecimientos más señalados en relación con las misiones, promo­ ver asambleas misionales para tratar cuestiones que atañen a la me­ jor marcha de las misiones y más eficaz ayuda y protección a los misioneros, como la habida en el Valle de los Caídos, 17 a 21 de no­ viembre de 1959, que en realidad fue un verdadero Congreso misio­ nal, en la que tomaron parte numerosas y destacadas personalidades y se trataron temas de interés para el Consejo y las misiones. Aparte de eso tiene el mismo Consejo Superior de Misiones orga­ nizada una Escuela de Medicina para los misioneros y además un De­ partamento de información donde se recogen cuantos datos y noticias digan relación a las misiones, a las obras benéficas que en ellas se realizan lo mismo que a la enseñanza, divulgándolo después para que sirva de propaganda en España y en el extranjero. Lo ha realizado, sobre todo, por medio de la revista España M isionera, que comenzó a publicarse en enero de 1944. Y ya en este plano de propaganda e información debemos agregar 4. C fr. Catálogo de los Misioneros y de los Religiosos españoles en el extran­ jero, E d icion es E sp añ a M isionera, M ad rid 1962, 18.