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GERMAN ZAMORA DE TORRALBA 69 de la naturaleza se exterioriza, por ejemplo, en los futuros contin­ gentes, que son, según el Santo Tomás interpretado por De Kon inck, contra Suárez, esencialmente contingentes, teniendo en esa inde­ term inación radical de la materia la causa intrínseca de su con tin ­ gencia (pa ra Suárez esos futuros serían en realidad necesarios y, sólo si sobreviene fortu itam en te la intervención de un agente libre, se tornarían contingentes, por tan to, extrínsecamente). La materia, declara De Kon inck , tiende hacia el hombre, pero por cam inos o subespecies incierta s... M. De éstas y parejas reflexiones demasiado «indeterm inadas» con ­ cluye De K on in ck : «Es, pues, imposible que el futuro esté entera y realmente predeterm inado en el estado pasado o presente del un i­ verso» 5S. Esto suprim iría, además, el tiempo. El determ inismo es una contradicción y el p.i. no crea en realidad problema n inguno. CONCLUSION Aunque pensamos volver amp liam ente en artículo ulterior sobre las reflexiones que lo expuesto nos sugiere, podemos anticipar ya al­ gunas conclusiones. En cuan to al principio m ism o se refiere, según su inven tor lo expone en la obra aludida al comienzo de este trabajo, Die physika- lischen Prinzipien der Quantentheorie, parece claro que la causalidad involucrada en las relaciones de indeterm inación no es la del prin ­ cipio filosófico de causalidad, sino la de la concepción de la física clásica. El m ismo Heisenberg establece el siguiente paralelism o: Teoría clásica: descripción de fenómenos en el espacio y en el tiem ­ po = causalidad. Teoría cuántica: a) descripción de fenómenos en el espacio y en el tiempo = relaciones de indeterminación. b) esquema m a tem á tico no correspondiente ni al espacio ni al tiempo = causalidad. Y tal causalidad significa en su contexto predecibilidad, deter­ m in ism o científico y, por cierto, de tipo m ecan icista; las relaciones de indeterm inación ju stam ente lo n iegan. De modo que, ampliando el precedente parangón , nos resultarían netam en te diferenciadas por 54. Ibid., 228. 55. Ib id ., 235.

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