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122 VID A P S IC O L O G IC A DE M A R IA la luz de la inteligencia, el colorido del sentim iento y la energía de la voluntad. Con el caudal de tendencias psíquicas que hasta ahora hemos hallado en el análisis nos proponemos reconstruir la figura de María. Es trabajo de paciencia y de técn ica delicadísima. La organización psicológica consiste en ensamblar de todas las tendencias halladas en la parte analítica dentro un todo psíquico y vital según el sistem a psíquico de la psicología de la escritura. Anteponemos para m ayor claridad el sistem a psíquico en sus lineas fundamen tales y sobre él organizaremos el psiquismo de María. Sigue luego la enumeración de las tendencias psíquicas motrices que hemos hallado en el análisis, junto con las que constituyen el psiquismo norm al del hombre. Frente a estas tendencias anotamos la intensidad aproximativa en centígrados, según el sistem a del Tratado de grafopsicologia, de Marchesan. Puede verse en esta obra la «constelación psíquica» a que corresponde cada una de las tenden ­ cias aquí mencionadas. En la descripción sin tética empleam os una valoración verbal de leve, media, notable y m áxim a con sus equivalentes como extra­ ordinaria, excelente, para designar las intensidades numéricas apro­ ximadamente en esta fo rm a : O designa la ausencia de la cualidad: de 10 a 30 leve; de 45 a 55 m ed ia ; de 60 a 70 n o tab le; de 90 a 100 máxima. Los matices entre estas designaciones se indican con los adver­ bios bastante o muy. No seguimos en teram en te la designación de Marchesan por motivo de facilidad para entender y por dar mayor oscilación a la intensidad de las tendencias psíquicas de María. Para no interrumpir la lectura rem itimos los «esquemas» a un apéndice, al final del trabajo, pp. 142-148. Si bien el lector deberá tenerlo presente para entender esta segunda parte de nuestro estudio. RECONSTRUCCION PSIQUICA DE MARIA. Procedemos, pues, a la reconstrucción psíquica del a lm a de María según los elementos encontrados en el análisis y de acuerdo con el sistema psíquico, según se indica en los esquemas. Por lo m ismo re­ construiremos la inteligencia de María, sus sentim ientos, sus deli