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BUENAVENTURA DE CARROCERA 285 mativo al menos en el negativo. A l propio tiempo servirán de orien­ tación , al ver el interés que se ten ia en la buena formación de los sacerdotes jóvenes, en orden a la predicación y m ejor desempeño de sus m inisterios apostólicos y sacerdotales. Igualm en te nos enseñarán cómo los nuevos sacerdotes no eran lanzados inm ed iatam en te de term inar su carrera a los trabajos m i­ n isteriales sin antes recibir lecciones prácticas de maestros experi­ m entados sobre el modo de componer sermones, de predicarlos, su comportam iento en el confesonario, catequesis, etc. I .— PREPARACION PARA EL APOSTOLADO E N LA O R D E N CAPUCHINA. Hace sólo cuatro años salió a luz un estudio, de no m u cha ex ten ­ sión, acerca de los llamados Estatutos de M isiones. Su autor, el P. Van der Marck, O. P. *. En su trabajo, parte histórico y parte canónico, no duda afirm ar que el primero de los Estatutos y el que dio origen a cuantas sim ilares a él se han hecho posteriormente, es sin duda alguna, el aprobado en 1887 para las M isiones capuchinas. Y le da tal importancia no sólo en cuanto a su primacía sino también a su causalidad, que llega a establecer esta conclusión : «Los otros E sta ­ tutos no hubieran quizás existido, de no haber precedido el Estatuto de los Capuchinos» 5. ¿Podríamos afirm ar que también la Orden Capuchina se adelantó a los demás Institutos religiosos y aún a lo legislado por la Iglesia, al hacer obligatoria esta preparación especial, apostólica y pastoral de sus jóvenes religiosos y sacerdotes? Quizás el a firm arlo rotundamente sería presunción. Pero desde luego sí podemos constatar que para los Capuchinos esa determ ina­ ción de la S an ta Sede estableciendo el curso de Pastoral, no h a cons­ titu ido una sorpresa. No viene a ser otra cosa sino el llamado curso de E locuencia, que se ten ía ya después de term inados los cuatro años de teología. Nos consta que otras Ordenes o Congregaciones religiosas, por 4. Wilhelmus H. M . v a n de r Marck, O. P„ Statuta pro Missionibus recentiora inter se ac praesertim cum iure ecclesiastico communi comparata, Münster, Aschen- dorff, 1959. 5. Ibid., 86. Esta afirmación la prueba en las primeras páginas de su trabajo (1-6). Fue aprobado este primer Estatuto de las Misiones capuchinas por decreto de la Congregación de Propaganda Fide, el 25 de julio de 1887 : Analecta O. F. M. Cap., 3 (1887) 262-280.

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