PS_NyG_1962v009n001p0099_0133

1 3 0 SILUETA SICOLITERARIA DE MANUEL MACHADO Siempre por Dios y siempre por España Puerta del cielo. Estrella matutina». Así es de múltiple y de varia la inspiración y la producción poética de Machado, el poeta de la gracia sutil y de la facilidad difícil. «Algo sutil e indefinible, dice un crítico, constituye su originalidad. Resulta sobrio y exacto en el tono, en el gesto, en el aroma, en la gracia, en el matiz en la musicalidad en la emoción. Breve. Leve. Elegante. Quebradizo. Floreo y jugueteo es su poesía; y de cuando en cuando, hondura delicada, filosofía popular, riesgo de fortuna, evocación co­ loreada» 22. A veces Machado, sobre todo en sus versos de madurez, se enfrenta con los hondos problemas de la idea o del sentimiento y para todos tiene la nota poética precisa, el enfoque milimetrado de su retina humana. Y precisamente entonces, cuando su pensamiento se hace más denso, cuando su serenidad creadora llega a la más plena viri­ lidad, es cuando nos regala también sus mejores rimas, su más pura musicalidad, su ritmo más depurado: «Una calle de Sevilla en tre rezos y suspiros... Largas trompetas de plata... Túnicas de seda... Cirios en hornaguero de estrellas feston eand o el cam ino... El azahar y el incienso embriagan los sen tidos... Ventana que da a la noche, se ilumina de improviso y en ella una voz — S a e t a - canta o llora que es lo m ismo: ’’Míralo por dónde viene el M ejor de los nacidos” ». Es indudable que para llegar a esta orfebrería del verso tuvo que afrontar el trabajo de la cincelación y el no menor ni menos ingrato de la superación del facilismo natural. Pero «por estas asperezas se camina / de la inmortalidad al alto asiento», como había cantado hacía siglos el mélico Garcilaso. La maestría versificadora de Machado maneja con insuperable 22. Federico C arlos Sainz de Robles, Enrayo de un Diccionario de la Literatura M. A guiiar, M adrid, 1.953, 2.” edic., t. II, p. 646.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz