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3 0 8 VALORES E SPIR ITUALE S.. E n el In s titu to de In ve stig a cio n e s P sico lóg icas de M ilá n , b a sán ­ dose en la g ran d ifu sión , bien comprobada, del gusto m ístico y ascé­ tic o ; con siderada su e fic a c ia como p rodu cto r de im pu lso s de s in te ti- zación cognoscitiva, v o litiv a y sen tim en ta l, y po r lo m ism o de so lid a - riza c ió n y u n ific a c ió n so cia l, se h a n em prendido in ve stig acione s con el fin de com p robar si existen medios p a ra d ifu n d ir la in te n s ific a ­ ción del gusto m ístico y ascético. L a s in ve stig acion e s tie n d e n : a) a au tom a tiza r la v isió n m e n ta l de lo sub lim e en las cosas be­ lla s y tam b ién en las cosas p rá c tic a s de la v id a ; porque la v isió n de cada re a lid ad en un cuad ro am p lísim o, es la más re a lís tic a y fecunda. b) a apoya r en estos dos modos el sen tim ien to , la in te lig e n c ia y la vo lun tad h a c ia la po tencia in fin it a ; sa tisfa c ie nd o el anhe lo de i n ­ fin ito ; re a lizando la sín te sis del yo con el n o -yo ; a rm on izando toda la v id a con el ambiente in fin ito , a pe sar de la m a lic ia de los demás y log rando a sí la abo lición de la an siedad y de la an g u stia que no sean acciden tale s y tra n s ito ria s . Si, como es de esperar, llegamos a obtener re su ltado s positivos, tendremos con ellos la respuesta a l p rob lem a an te rio rm en te ind icado y a sí se lo g ra rá u n a m ayo r tra n sp a re n c ia entre el conscien te y u lt r a - subconsciente. 9 .— El hombre sería una realidad a través de la cual Dios gusta siempre ” ex novo e t d ifferen ti” su propia creación com o d es­ tinatario. L a d o c trin a que b ro ta rá como con secuen cia de la s re a liza cion e s esperadas, nos lle v a rá a con sid e ra r, en tre o tras cosas, que el v e rd a ­ dero d e stin a ta rio de la creación no puede se r más que la vida. Donde m ás in te n sa y to tal sea la vida , a llí será más in te n sa , te n d rá m e jo r v e rific a c ió n la c a lific a c ió n de d e stin a ta rio . E l ve rdade ro d e s tin a ­ ta rio es, pues, el ser que es la V id a m ism a : Dios. Más, como E l co­ noce la creación antes de re a liz a rla , no puede re c ib irla (después de re a lizad a ), como u n a novedad ; n i ap rend e r a conocerla, go za rla n i o rg a n iz a ría desde pun tos de v is ta lim itado s, siempre nuevos y d i­ ferentes. E sta es la cond ición ind ispen sab le p a ra poder re c ib ir la creación como de stin a ta rio . P a ra cum p lir esta cond ición , E l saca de la n a d a con tinuam en te seres caren te s de todo conocim iento , nuevos, que ap renden a conocer, a gozar y o rg an iz a r la creación . Y de esta m an e ra goza D ios de la creación a travé s de la s emociones de esos seres y de su de sa rro llo psicológico con p le n a re a lid ad y no en h ip ó ­ tesis. Y de este modo tam b ién E l se con stituye y se p re sen ta como