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BUENAVENTURA DE CARROCERA, O. F. M. CAP. 1 4 7 una liga defensiva y suscrito los acuerdos tomados: que ahora se trataba de que también los Electores católicos se uniesen con los otros (35). Con seguridad que al mismo tiempo le enviaba los acuer­ dos o artículos firmados por ellos en Munich el 10 de julio de 1609 (36). Y aún le vuelve a escribir el 28 del mismo mes para co­ municarle nuevas noticias, tratándole con suma confianza y fami­ liaridad (37). Zúñiga, inquieto sin duda y muy preocupado, escribe de nuevo a Felipe III a mediados de agosto, exponiéndole que él hacía todo lo posible para sustentar la opinión y confianza del rey con los ca­ tólicos de Alemania, pero que la tormenta era tan grande que se hacía forzoso, para que todo no se perdiese, que el Papa y el rey acudiesen con veras a la protección de las ligas que se van tratando, «como lo habrá ya representado a V. M. el P. Fr. Lorenzo de Brindis, más juntamente con la oferta y principio de socorro se les podría significar cuán conveniente es excusar el rompimiento en cuanto buenamente se pudiese, de que tengo muy advertido al duque de Baviera» (38). No podemos fijar la fecha exacta del viaje de San Lorenzo de Génova a Barcelona. Aquí se entrevistó con el virrey de Cataluña, duque de Monteleón, y tomó por compañero a un capuchino, el P. Severo de Lucena, quien tenía muy buenos conocimientos en la cor­ te, pues su hermano, D. Sebastián de Tobar, era una de los secre­ tarios de Felipe III (39); con él se dirigió a Madrid a donde debió llegar en la primera quincena de septiembre, hacia el 14, poco más o menos. Casi en esa misma fecha regresaba también a Madrid el rey (40). San Lorenzo, después de visitar al Nuncio, presentar las cartas de recomendación que para él y para otros personajes de la grandeza traía, sobre todo para el de Lerma, su hijo el de Uceda y Rodrigo Calderón, solicitó audiencia con el rey, que le fue luego concedida; lo propio hizo con la reina, repitiendo esas visitas a uno y otro soberano durante varios días, según nos refiere su compañero el P. Lucena: «De esto y de la opinión tan grande que se ha es- ( 35 ) C a rta de M axim ilian o (25 de ju lio de 1609 ) (A G S . Estado, Leg. 2495 , íol. 25 ). ( 36 ) Ibid., íol. 102. ( 37 ) Ibid., fol. 26 . ( 38 ) C a rta de Z ú ñ ig a al rey (18 agosto 1609 ) (Ibid., fols. 9 - 14 ). ( 39 ) C fr. La Provincia, 369 . ( 40 ) C a rta del P. L u cen a (M adrid, 12 octubre de 1609 ), en A jofrin , 719 . E l citado P. L u cen a escribió o tras v a ria s c a rta s relativ as a esta fu n dación en M a­ drid, pero sólo se con serva ésta y la que hem os citado an teriorm en te del 15 de noviem bre.