PS_NyG_1960v007n001p0031_0116
A L E JA N D R O DE V IL L A L M O N T E 83 salvadora», pero no es ésa la fe que justifica. Además, sin negar la importancia primaria de la fe en el proceso de la justificación, nunca se puede demostrar que ella sola baste. La Escritura menciona continuamente otras buenas obras a las que atribuye la gracia de la justificación (112). D ispuesta el a lm a bajo la acción de la gracia, se sigue la m isma justificación . En la naturaleza ín tim a de la justificación las ense ñanzas de San Lorenzo se condensan en dos apartados. En primer lugar una serie de textos esparcidos a lo largo de la Hipotiposis se refieren a la refutación de la doctrina luterana de la justificación como imputación extrínseca de la justicia de D ios; o como un mero favor externo que no importa transmutación real n inguna en el a l m a del hombre. Aún después de recibir la «justificación» el hombre seguiría siendo ’simul iustus et peccator”. En realidad el hombre pecador nunca puede de verdad llegar a ser «santo» delante de D ios; ni aún bajo la acción de la gracia de Dios (113). En sentido positivo San Lorenzo expone la doctrina común de la Iglesia sobre la justificación como interna e intrínseca renovación del hombre (114). Su exposición es extremadamente breve, enum e rando las causas de la justificación según lo hace la teología esco lástica. Precisamente quiere el santo Doctor oponer esta nitidez y precisión de los teólogos católicos a las interm inables y caóticas distinciones luteranas sobre la justificación . La causa eficiente de la justificación es D io s; causa material instrumental el Bau tism o; causa meritoria C risto ; causa material el m ismo h om b re ; causa fo r mal, la gracia de Dios. Pero no hay que entender la gracia como mero favor y benevolencia externa de D io s; sino en el sentido que dice San Pablo cuando la llama renovación y regeneración del Espí ritu (115). C) Sentido de las buenas obras del cristiano. — Entre los errores luteranos en torno a la justificación , el que mereció una atención mayor por parte de San Lorenzo fue el de las buenas obras: cuál es el sentido, necesidad y valor de las buenas obras en el hombre que recibe la justificación. Y a nos hemos referido a la doctrina católica sobre la necesidad, valor y alcance o mérito de las buenas obras, previas a la ju stifi cación del hombre adulto pecador. En este punto la disconform idad (112) Hypotiposis, II-3, pp. 223 ss.; 228-235. Felipe de Fuenterrabia, Argu mentación bíblica de S. Lorenzo de Brindis en sus controversias.... pp. 342-366. (113) Los textos de San Lorenzo en B en edictos de S. Paolo, ob. cit., pp. 98-100. (114) Hypotiposis, II-3, pp. 248-252. (115) Ibid., pp. 212-214.
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz