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SANTOS DE CARREA 19 cónditos sentidos ymisterios insondables. Por esemotivolos «secre- tiores theologi», es decir, los Cabalistas, afirman queDios creó los dosmundos—el celeste yel terreno—enlas dos letras-números de su nombre: y=10, número perfecto, representa el mundo celeste; x - 5, lamitadde 10, representa el mundo terrestre, medio ente sumaperfeccióny lasumamiseria. Después quieredemostrar, deun mododel todoingenioso, queel nombredeDioses uno, raízdetodos los números y suprincipio, y por lomismo, manifiesta claramente lanaturaleza divina, sumamenteuna, sumamente buenayprincipio detodas las creaturas. Ensegundo lugar, alabael número cuaterna­ rio delas letrasdel nombredivino: origendel cieloydel mundocor­ póreo; por él Dios se derrama sobre las criaturas. Y toda criatura consta de una disposición o estructura cuatripartita. En tercer lu­ gar, muestraSanLorenzo cómoD'.os se complace especialmente en el número 10 (= y). Esto lopruebaabasedeejemplos tomadosdela SagradaEscrituray de laTeología. Demodo especial, el número 10 representa la perfecta caridad. En cuarto lugar, trata del número cinco (= h). Este número simboliza laperfectaunión. El compren­ de y abarca cuantohay enel universo: lasubstancia increaday la substancia creada. Enquinto lugar, habladel número seis (= w). Y tambiénseesfuerzael santoDoctorenmanifestarloamorosodeeste número. «Taninfatigabilis—ut itadicam—amicus est hominis iste numerus, ut ei perpetuo comitetur et ad finemipsumeumperdu- cat» (25). Finalmente, declara cómo también los números múltiplos de estos cuatro están llenos de misterios y cómo son benéficos y amorosos. El Opúsculo fue compuesto probablemente antes del año 1586 y después del 1584 (26). Laautenticidad laurencianade laobrapare­ cebastante cierta. III) CARACTERESYPRINCIPIOSEXEGETICOS Debemos hacer unadistinciónprevia: SanLorenzocomoexégeta científico, tal comosenos presenta en la Explanatio in Genesim, y SanLorenzocomoexégetakerigmático, es decir, ensuusode laBi­ blia enordena lapredicaciónyenordena laapologética. Este se­ gundoaspectoesdesumointerés, yenél senosmuestraSanLoren­ zocomounode los predicadores «bíblicos» más sobresalientes deto­ dos los tiempos. Nuestro trabajo se fijaráprincipalmente enlos ca- (2 5 ) ibid., p . 480. (2 6 ) Ibid., p . 430, n o t a 3.

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