PS_NyG_1958v005n009p0235_0253

242 CONCEPTO DE IG L E SIA EN EL N . T. Sobre su au ten ticid ad m ucho se h a escrito. H oy todos están de a cu e r­ do en reconocer el ca rá c te r a rca ico de este d icho sobre el p rim ado . No puede •ser p roducto de un ambiente h e len ista , debe su o rigen — o m e jo r, su fo rm u la c ió n— , a la com un idad pale stinen se . Pero ¿es un p roducto de esta com un idad? Desde el pun to de v is ta lite ra rio n ad a h a y que lo h aga suponer. E l que sea u n «dicho» p rop io de Mt. — y ausente en Me. y Le.— , n ad a dice co n tra su au ten ticid ad . No es la ú n ic a ocasión en que Mt. sigue fuen te s de in fo rm a c ió n p rop ias. Po r o tra pa rte , no está probado que el d icho se encuen tre en su pue s­ to o rig in a l, en su p ro p ia c irc u n s ta n c ia , aunque debemos reconocer que el contexto a c tu a l es bueno. L a ú n ic a d ific u lta d c o n tra la a u ten tic id ad jesuana del logion en cue stión p ro v e n d ría de su contenido. ¿H ay algo en él que esté en con ­ trad ic c ió n con la d o c trin a de C risto , ta l como la conocemos c ie rta ­ mente po r los Evange lio s? Y a hemos visto que n ad a se opone a que C risto llam e a su com un idad m e sián ica , la com un idad que E l in a u ­ gu ra, su Ig le sia . U n a respuesta a la p regun ta fo rm u la d a la te n d ría ­ mos exam inando la posición de Ped ro en el N. Te stam en to : su p re ­ pond e ran cia , su a c tiv id ad re cto ra en el seno de la p rim itiv a co­ m un id ad c ris tia n a (14). Esto nos lle v a ría m uy lejos. Como m uy bien h a mostrado C u llm a n n , n ad a h a y en este log ion que esté co n tra el pen sam ien to de C risto . B ie n podemos c o n c lu ir con P h .-H . M enoud : «Todo en la p red ica ción de Je sú s: el té rm ino de H ijo del hombre con el que se designa y que en su p en sam ien to es in sep a rab le de la com un idad de los ú ltim o s días, los actos e sencia le s de su m in is ­ te rio — re u n ió n de los d iscípu los, in stitu c ió n de la Cena, m isión co n ­ fia d a a los Apóstoles— todo m ue stra que la idea de la Ig le s ia está en el cen tro del pensam ien to de Je sú s y ordena todos sus actos, bien que la Ig le s ia sea designada p referen tem en te con las im ágenes t r a ­ d iciona le s de rebaño, ed ificio o templo» (15). E l pensam ien to de C risto sobre su Ig le s ia está en la lín e a p ro fè tica del A. Testamento. N ada h a y en él que co n trad ig a la a c titu d g ene ra l de su d o c trin a y de su m isión . Se ría in te re san te en extremo ir re co rriendo los ca ra cte re s con que se describe el fenómeno de la Ig le s ia en cada Evange lio , en la tra d ic ió n común y en la s trad ic io n e s o fuen te s p a rticu la re s . E n la Sem ana B ib lic a se estudió especialm en te los cara cte re s que p resen ta el Evang e lio de S. Mateo. E l D r. C a sc ia ro in sistió en los rasgos v ie - jo te stam en ta rio s con que es d e scrita la Ig lé s ia én el Evang e lio de ( 14 ) C fr. O. C u llm an n , obra, cit., pp. 28 - 48 ; M. Schm aus, obra cit., pp. 177 - 185 . ( 15 ) Art. cit., p. 84 .

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz