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188 SABIDURIA Y FILOSOFIA .. venimos señalando, es lamismahistoriade laculturahumana. Im­ posible dar cuenta de todo ello; pero sí podemos a la luz de este plan de Dios iluminar los dos conceptos básicos, cuya clarificación vamos buscando enestas cuartillas: sabiduría y filosofía. II.—LOSHOMBRESENBUSCADELASABIDURIA. Cuandopensamos que conmucha probabilidadpasan de 100.000 los años de peregrinación del hombre sobre la tierra, no deja de causar extrañeza lapresuntuosamanía de nuestra cultura occiden­ tal, retoñotardíodel espírituhumano, por juzgarse así mismaple­ nitudde saber, eclosiónculmende la inteligencia. Como justifican­ te de esta actitud se subsume por lo bajo que hace dos mil qui­ nientos años nació la filosofía en la faenamental deTales deMi- latoal preguntarse por el principio, « arché », de las cosas ydel mo­ vimiento. Esto al menos se va diciendo por las diversas historias de la filosofía parausoy consumode nuestros cursos superiores de enseñanza. Mas, ¿seráverdadque fué entonces cuandopor primera vez sepreguntó el hombre sobre los últimos porqués? ¿Seráverdad que la inteligenciahumanaentraentonces ensumejor navegación? Antes de los filósofos jónicos, ¿qué nos ofrece la culturahuma­ na?, sepreguntael investigador. Y responde: técnica y religión. Am­ bos temas los hallamos vinculados en el mito de Vulcano. Un dios queenuna fragua forja los rayos deJúpiter: undiosherrero. ¡Qué sugerente es aquí el mito! Enuna escena el hombre ha tratado de satisfacer el doble anhelo que le impele a pensar: el anhelo del vivir diariopor la defensa biológica y el anhelo religioso. Con téc­ nicas rudimentarias o desarrolladas de cuya evoluciónnos habla la prehistoria y luego lahistoria, el hombre ha logrado ir defendiendo contra ingentes fuerzas adversas su «bios»; y conprácticas religio­ sas, santas unas veces, y no raramente monstruosas, ha satisfecho suanhelo deDios. Técnica y religiónson los dos productos del es­ pírituhumano en los milenios anteriores a la cultura que se inició en las colonias jónicas del Asia Menor. Pero de esos dos anhelos uno era tenidopor principal: el religioso. Por ello para estos mile­ nios de vieja cultura técnico-religiosa vale lo que escribió J. Ma- ritain sobre el desarrollo de toda cultura: «Porque este desarrollo noes sólomaterial, sinotambién, yprimordialmentemoral, esobvio queel elementoreligiosojuegueenél principal papel, desarrollándose así la civilizaciónentre dos polos: el polo económico, enel aspecto