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18ò SABIDURIA Y FILOSOFIA .. venido a añadir históricamente la realidad sobrenatural de la vida de lagracia. Es demasiado conocida la tragedia humana respecto de la vida delagraciaparaquenos detengamos unavezmás enrepetirla. Pe­ ro menester es tenerla presente si queremos calar en los estratos más hondos de realidadhistórica humana. Antes de la tragedia la naturalezaenteraerapábulovivificanteparaalimentar lavidadela gracia, eracaminodeluzqueconduciapormil senderosalamorada deDios. Después de latragedia, el hombre se incurva segúnla frase expresiva deS. Buenaventura. Eigualmente se incurva la naturale­ za que con demasiada frecuencia ya no es itinerario de Dios sino ocasión tentadora para alejarse de El. Esel momentoderecordar los tres libros quesegúnS. Buenaven­ turaDios ha compuestopara que el hombre lea enellos la imagen desuCreador. El primer libro esdelascreaturasencuantoquecomo vestigios eimágenes deDios lerevelanymanifiestan. Este libro, co­ menta el Doctor Seráfico, «efficax erat in statu naturae conditae (antes del pecado), quando nec líber iste obscurus erat, nec oculus hominis caligaverat». Pero se hizo este libro «aenigmativus et obs­ curus », por el pecado. Entonces Dios le procuró otro libro, el de la Sda. Escritura, es decir, la divina revelación que nunca ha faltado ni faltará al hombre desde el principiodel mundohastael final de los siglos. Mas porque «non omnes oboediunt Evangelio », ni todos, añadimos por nuestra parte, han tenido posibilidades de oirlo, Dios ha provisto al hombre de un tercer libro, llamado LIBER VITAE. Este libro de vida no es otro que el mismoVebo deDios de quien dice S. Juan en el prólogo de suevangelio: «illuminat omnem ho- minem venientem in hunc. mundum» ( Joh ., I, 9) (10). Concluyamos, segúnesto, que el hombre noha quedado abando­ nadoasusuerte enladefensadesuvidabiológicaydesuvidaes­ piritual. Si enel campode lavidameramentebiológicanoestádo­ tadodetanfinos instintos comoel bruto, tieneporsuparteunain­ teligenciaquesuperaalasmaravillasdeaquel. Enel planodelavi­ daespiritual, tiene tres caminos de luz: el de las creaturas, el de la palabrareveladayel queseñalael Verbointerioratodohombreque vieneaestemundo. Enverdad; quésimpleygrandiosoesel plande Dios. Sucintamente nos lodejótrazadoS. Buenaventura enunas lí­ neas desu Collationes in Hexaem. Diceasí: (10) De mysterío Trinitatis, q. I, a. 2; V, p. 54-55.