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FR. MAURICIO DE BEGOÑA 1 7 7 conduciendo a los jóvenes, sea a abstenerse de las películas envile­ cedoras, seaaelevarseaunacomprensiónsuperiordepelículas cuyo realismo excesivo el público acepta pasivamente. 3) Que las experiencias de iniciaciónrealizadas hastael presen­ te hanmostrado que los jóvenes aprendena juzgar y aescoger las películas, yque aveces, como sehapodidocomprobar, esta forma­ ciónde susentido crítico, ha tenidopor consecuenciauna frecuen­ tación menos asidua al cine. La Asamblea formula los votos siguientes: A) Que todos los directores deestablecimientosy todos los edu­ cadores católicos, seinteresenpor laorganizaciónregularyracional desesiones de iniciaciónenel cinepara los alumnos apartir de los 13 ó 14 años. B) Que esta formación se dirija sobre todo a enseñar a los alumnos—mercedauna juiciosa seleccióndepelículas—aapreciar una obra cinematográfica; esta formación se apoyará sustancial­ mente en la presentación, sobre discusiones cuidadosamente diri­ gidas, ypodráprolongarsepormediodecomposiciones escolares so­ bre el cine, ymediante la inclusión de esta disciplina en el cues­ tionario de exámenes de literatura. C) Que encada centrodocente senombre unresponsable com­ petente de la educación cinematográfica. D) Que se organicen cursos y sesiones ilustrados con proyec­ cióncomentadadepelículas, enplannacional oregional. Tema segundo: La formación cinematográfica de los Dirigentes. Considerando: 1) QueenlaEncíclica Vigilanti Cura, SuSantidadPíoXI llama la atención de los Obispos y Sacerdotes sobre sus deberes en rela­ ciónal cine: 2) Que según la misma Encíclica «es imposible hoy descubrir otromedio de influencia capaz de ejercer sobre las multitudes una acciónmás eficaz», yque laeducaciónde lasmasas supone laexis­ tencia de minorías competentes en este terreno. La Asamblea expresa su deseo: A) De que a los Sacerdotes y otros educadores (religiosos y re­ ligiosas), se les dé la posibilidadefectiva dever y juzgar las gran­ des obras cinematográficas ensesiones especiales, odeotramanera. B) De que se obtenga la formacióncinematográfica de los diri­ gentes cristianos por medio de cursos superiores sobre el cine, por cine-clubs, por artículos valiosos enrevistas y grandes diarios. C) De que en los Seminarios y en los otros centros de forma­ ción clerical encuentren los futuros sacerdotes posibilidades de ini