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para fácilmente poder determinar las diversas escuelas de espiritualidad cató= lica: S. Pañi lo ha intentado al hacer el análisis de los principios fundamentales que diferencian estas diversas corrientes de espiritualidad, y L . Casutt al tratar de mostrarnos la rica herencia que el Pobrecito de Asís legó a sus hijos, lo que motiva en el libro muchos puntos de referencia a otras escuelas y hasta dedica un capítulo a notar los matices diferenciales que separan la espiritualidad de San Francisco de la espiritualidad vivida por San Benito y San Ignacio. A l comparar estos dos libros entre s í llama poderosamente la atención el método, tan distinto, que han seguido sus respectivos autores. S. Pañi utiliza un método predominantemente teórico y dogmático, mientras L . Casutt prefiere el que él mismo llama método histórico, completado con referencias más a la psicología que al dogma, por lo que nosotros lo hemos denominado histórico=psicológico. Actitud tan distinta para penetrar en el sancta sanctorum de la vida cris= tiana, nos ha movido a escribir estas líneas con el propósito de indagar si no será posible un procedimiento más integral que el utilizado por ambos, para llegar a comprender de algún modo la vida de Dios en las almas de esos santos extraordinarios que con su influjo han originado las diversas escuelas de la espiritualidad. Pero antes de exponer nuestras observaciones personales, analicemos el punto de vista de dichos autores sobre los métodos que han seguido en la discriminación de las diferentes escuelas de espiritualidad católica. I. M E T O D O T E O L O G lC O = S lS T E M A T I C O Denominamos el procedimiento seguido por S. Pañi método teológico = sistemático. Nuestro primer deber, al hacer esta afirmación, es justificarla, pues es posible que nos contradiga él mismo, alegando que precisamente en su libro se opone netamente a X . Maquart ( 3 ), «il quale asseriva che la spiritualitá dei fundatori era qualcosa di accidéntale, mentre l'elemento precipuo d' una scuola doveva ricercarsi nei principi teologici che avevano servito di base all'elaborazione teórica della dottrina spirituaie» ( 4 ). S i, pues, S. Pañi se opone al método de Maquart, por juzgarlo demasiado teológico, ¿por qué calificamos nosotros al suyo de teológico=sistemáticó? Esta pre= gunta nos obliga a entrar de lleno en el análisis de la obra de S. Pañi. Se abre ésta con una especie de introducción, en la que propone los presupuestos de su futuro razonamiento. Por ello la titula «Premesse». El primer presupuesto cue analiza es el concepto de espiritualidad. Para algu= nos, según S. Pañi, la espiritualidad se debe limitar al estudio y p áctica de 134 M étodo para d eterm in a r las escu ela s de e s p iritu a lid a d católica introducidas por el A., publicado en Roma, Edizioni T. O. F., 1952. E l título de la edic. alemana es más expresivo jr orientador: Das Erba eines grossen Herzens. Studien zum franziskanischen Ideal. (3) En su libro S. Pani siempre escribe X . Marquart. Confrontando citas, hemos llegado al convencimiento de que se trata del conocido filósofo escolástico de Reims, y por lo mismo, la «r» añadida es a cuenta del tipógrafo. (4) O. C„ p. 18.