PS_NyG_1954v001n001p0039_0084

54 Valoración de la Metafísica «Todos los verbos suponen el verbo ser, y Dios se definió: «Aquel que es» ( 16 ). Desde este momento la Metafísica aparece como justificada; es de­ cir, posible, útil, necesaria. Podrá resultar tan difícil como se quiera; será oscura como muchos de nuestros conocimientos y quizá más aún que los demás; será muy limitada: será una Metafísica «humana»; es decir, im­ perfecta en cuanto al modo de conocer y al alcance del conocimiento, muy imperfecta con relación a la Metafísica posible para otras inteligencias supe­ riores a la nuestra, independientes en absoluto de la materia. Pero, aun así, será la reina, madre y maestra de las demás ciencias humanas. Esto se echará de ver claramente con la prueba que sigue a continua­ ción, la cual demostrará la necesidad de la Metafísica respecto de las diver­ sas ciencias. V.— N e c e s id a d d e l a M e t a f ís ic a . Sería deseable poder captar con una sola mirada de conjunto las diver­ sas razones en pro de la Metafísica y los distintos errores acerca de ella, de su posibilidad o necesidad, por lo menos en la raíz ontológica de las pri­ meras y de los segundos, y mejor aun si fuera dable todo ello en un bre­ ve cuadro sintético. Por fortuna eso es factible, ya se ha realizado antes de ahora. Dicho croquis es el siguiente: Metafísica es el conocimiento científico del ser en cuanto tal, de las primeras causas y de los primeros principios. Por lo mis­ mo, ha de constar de estos tres elementos constitutivos: 1. Un «sujeto» dotado de potencia intelectual, porque como se trata de conocimiento científico en el sentido propio de la palabra, necesariamen­ te ha de ser intelectivo y universal; propiedades que sólo se dan en faculta­ des cognoscitivas superiores a los sentidos. 2 . Un «objeto», que serán los seres, prescindiendo de la materia con el tercer grado de abstracción explicado anteriormente. En otros términos: o espíritus o cuerpos considerados sin materia y sin mutabilidad: no sólo el ser en común, sino todos los seres en cuanto seres. 3 . La «unión intencional de ese sujeto con esos objetos». Dicha unión requiérese para toda suerte de conocimiento ( 17 ). Pues bien, la negación de la Metafísica puede dimanar de la negación o errónea interpretación de cualquiera de esos tres elementos, o de varios de ellos simultáneamente. En efecto, comienza la serie de opiniones falsas, desvalorizadoras de la (16) G ar rigo ü -L agrange , 1. c., pág. 98. (17) M u ñ iz , o. c„ págs. 217 ss.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz