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SUCEDÁNEOS DIVINOS NAT. GRACIA LV 3/septiembre-diciembre, 2008, 629-693, ISSN: 0470-3790 685 Mediante el recurso al texto hebreo, llega a la conclusión de que las imágenes prohibidas son los ídolos. Y lo ve confirmado por los LXX que traducen Ex 20,4 por ídolo. Ahora bien, el ídolo es la imagen del dios falso. Luego lo que el texto sagrado prohíbe son las imágenes del dios falso, no las imágenes del Dios verdadero, como piensa Calvino y, entre los católicos, el Abulensis y Durandus (“doc- tor modernus”, Maestro de teología, que murió el 1334). Los argumentos aducidos para demostrar la legitimidad de hacer imágenes del Dios verdadero los reproducimos a continua- ción, como evocación de la interpretación servilmente literal de la época: 1°) La imagen del Dios verdadero no es un ídolo, que era lo que estaba prohibido. 2°) Que la prohibición afecta únicamente a los dioses ajenos consta de lo precedente: “No tendrás más Dios que a mí” y de lo siguiente “No las adorarás ni les darás culto”. Luego la prohibición se centra en los dioses falsos. 3°) Dios mandó a Moisés hacer una serpiente de bronce ( Nm 21 ,8 ). Luego las prohibidas eran las que representaban a los dioses falsos. 4°) Dios manifestó su imagen corpórea y sensible a Abrahán, a Isaac, a Jacob, a Isaías, a Ezequiel, a Moisés y a otros muchos cuando se les apareció. 5°) La imagen de Dios no es injuria ni deshonra a Dios. Y esto lo demuestra con dos argumentos: no se hace ninguna injuria cuando se pinta a los ángeles, que son espíritus puros; si no se les deshonra a ellos, tampoco a Dios y, en segundo lugar, no se des- honra a Dios cuando, al modo humano (= anzropopazós ) se le atri- buyen ojos, narices, oídos, manos, pies y otros miembros. Más aún, Dios descendió a la misma figura humana cuando el Verbo se hizo hombre y asumió su figura. 6°) Calvino se apoya en la afirmación siguiente: ¿”A quién me compararéis, de suerte que yo me asemeje a él, dice el Santo”? (Is 40,25). La idea es, responde A. Lapide: ¿Por qué habéis hecho imá- genes falsas del Dios verdadero? (Así lo confirman Jr 10,6: “No hay