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BERNARDINO DE ARMELLADA 198 NAT. GRACIA LV 1/enero-abril, 2008, 193-227, ISSN: 0470-3790 partes… Ser y pensar es lo mismo’ 8 . Esta paralizante visión parme- nidiana de la realidad ha marcado la lógica de muchos pensadores, uno de los cuales y más conspicuos en la historia del pensamiento ha sido Baruch Spinoza. Pero ya Aristóteles bajó de las nubes este idealismo absoluto, lo mismo que haría con el idealismo relativo de Platón. El ser puede ser ‘ente puro’, actualidad absoluta, e. d. Dios, o actualidad relativa a una potencia que lo limita –el acto y la potencia–: teoría que subyacerá en todo el pensamiento cristiano y árabe. La aceptación cristiana de la doctrina revelada sobre la crea- ción de la nada, delimitaba de un modo radical la diferencia entre Dios y las criaturas. Dios es de una manera y las criaturas son de otra manera . Mejor, las criaturas somos de esta manera –nuestra experiencia– y Dios es de otra manera. La manera de ser de Dios se revela como absolutamente distinta: “… porque soy Dios, no hom- bre; en medio de ti yo soy el Santo ” [ Os 11,9 ]. La conclusión de que Dios es el ser absolutamente necesario llevó a la búsqueda de algún signo dentro de nuestra contingencia que llevara a la comprensión de Dios como ser necesario. Y se encontró, en lo absoluto de los primeros principios de nuestro conocer, el hilo de comunicación con lo absoluto de Dios. Sería una especie de intuición innata de Dios, que San Buenaventura modera llamándola ‘cointuición’, o referencia indirecta a lo absoluto divino, un ‘a priori’ mental o axioma previo a todo discurso 9 . En contraposición a este optimismo desligado de la experien- cia, una actitud más realista reconoce que la idea del ‘ser’ llega a 8 Cf. G. FRAILE, Historia de la Filosofía . I Grecia y Roma (4ª ed.) (Madrid 1976) 185. 9 «Primo ergo anima videt se sicut speculum, deinde Angelos sive intelligentias sicut lumina et sicut medium delativum; sive videt in se sicut in speculo, in Intelligentia sicut in medio delativo lucis aeternae et contemperativo; deinde in luce aeterna tan- quam in obiecto fontano, quantum ad illas sex conditiones dictas, et rationabiliter et experimentaliter et intelligentialiter. - Dum haec igitur percipit et consurgit ad divinum contuitum, dicit, se habere intellectum adeptum, quem promiserunt philosophi; et ad hoc veritas trahit» . BONAVENTURA, Collationes in Hexaemeron , V, 33; V 359b. Cf. Iti- nerarium , 2, 11; V, 302b.