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EL PRIMADO ABSOLUTO DE CRISTO EN ESCOTO… NAT. GRACIA LV 1/enero-abril, 2008, 9-77, ISSN: 0470-3790 67 mínima variación en los así llamados ‘grandes números’, habría hecho imposible la aparición del ‘hombre’. Y el ‘hombre’ es 36 . Desde otra vertiente del pensar microfísico de hoy, el espíritu humano y su mirada actual sobre el mundo no es indiferente. Por el contrario, decide decisivamente en los acontecimientos mera- mente físicos ya acontecidos por ser, el espíritu vidente del hombre, el gran ‘reductor de ondas’. Diríamos, en conformidad con ciertos microfísicos de hoy, que si bien hubo necesidad que hubiera natu- raleza para que aconteciera el hombre, hubo necesidad del hombre para que hubiera saber y concepto de naturaleza; hoy, al parecer de ciertos científicos, se debería negar la primera parte de la afir- mación. En consecuencia, no hay naturaleza sin espíritu humano, el gran reductor real y eficiente de ondas. Y desde entonces, desde la venida del hombre, la naturaleza ha sido profundamente ‘redu- cida’ por el principio antrópico. En consecuencia y de hecho, según ciertos microfísicos, la mirada del hombre (del espíritu del hombre) estaba operante ya al principio del mundo, así como en su decurso desde su operación actual. De todos modos, hoy se acepta sin más la posibilidad de otros mundos estructuralmente diversos de hecho del nuestro. Y esto es importante. Escoto ha enseñado también la posibilidad de otros mundos, como hemos visto. Pero su justificación no es debida al juego libre de leyes indeterministas (no se excluyen, sin embargo), sino que es debido al principio libre creador, que es quien justifica la indeterminación como su correlato y que, filosóficamente, se interpreta como contingencia del ser finito. Decir también que el principio antrópico se justifica en Escoto por el principio del ‘Dios ama darse al otro y quiere que este otro le ame’. Es verdad que apelar a opiniones y soluciones científicas es peligroso para la Teología. Pero no es menos verdad que el recurso a un pensar determinado y situacional de lo que humanamente se sabe sobre el mundo ha sido siempre introducido en todo pensar 36 Para una comprensión del contenido de lo designado por principio antró- pico cfr., entre otros, el ya citado S.W. HAWKING, O.c. , 166 s.