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606 MIGUEL ANXO PENA y Salamanca estaban unidos por unos lazos y conexiones de primer orden, totalmente imposibles para otros contextos y países, que per- mitían una lectura de continuidad frente a la ruptura tan evidente que habían sufrido. La situación volvía a ser providencial, puesto que ambos lugares, tanto en Roma como en Salamanca, los jesuitas contaban además con una tradición y una historia que les servía de apoyo seguro en aquel momento tan sumamente complicado. Así, para 1891, el Seminario de San Carlos de Salamanca contaba con un total de 515 alumnos, de los cuales 325 eran internos y 190 externos, número nada desdeñable, si tenemos en cuenta que, en ese momento, la Universidad Literaria de Salamanca contaba con un total de 1.064 alumnos, entre oficiales y libres 69 . 2.4. E L C OLEGIO DE ESTUDIOS ECLESIÁSTICOS Las intenciones del P. Cámara, dirigidas hacia la cualificación y formación de un selecto grupo de clérigos, que pudiera servir de modelo y alternativa ante la situación presente, tendrá una cordial acogida, dos años más tarde, en el Concilio Provincial Vallisoletano, que aprobará la erección en Salamanca, para toda la provincia ecle- siástica, de un Colegio de estudios superiores 70 . Las disposiciones acerca del mismo eran las siguientes: 69 Cf. J.Mª HERNÁNDEZ DÍAZ, “Estudiantes de los siglos XIX-XX. Aspectos sociales”, en L.E. RODRÍGUEZ-SAN PEDRO (coord.), Historia de la Universidad de Salamanca. II. Estructuras y flujos (Salamanca 2004) 704. De todos modos, es preciso hacer una anotación a los números, puesto que los números están crecidos, con los libres. Esto lo podemos confirmar con los datos referentes a una década posterior. Así, en el curso 1899-1900, la Universidad de Salamanca tenía un total de 1.034 alumnos, de los cuales 412 eran oficiales y 622 libres, distribuyéndose de la siguiente manera. En la Facultad de Letras, 36 oficiales y 52 libres; Derecho, 171 oficiales y 301 libres; Ciencias, 24 oficiales y 110 libres; Medicina, 181 oficiales y 156 libres; a los que se unían 3 libres de notariado. No cabe duda que los datos resultan elocuentes, constatándose que las humanidades ocupan ya un ínfimo lugar. Cf. V. DEL ARCO LÓPEZ, “El siglo XX: 1900-1936”, en M. FERNÁNDEZ ÁLVAREZ (dir.), La Universidad de Salamanca. I . Trayectoria histórica y proyecciones (Salamanca 1989) 236. 70 Cf. Ib . Para lo dispuesto por el Sínodo: Acta et Decreta Concilii Provin- cialis Vallisoletani in alma Metropolinata Ecclesia celebrati diebus a XVI Iulii ad I Augusti anno Dni. M.DCCCLXXXVII (Vallisoleti 1889) 240. b q l s C p
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