NG200701019
518 ÁNGEL INFESTAS turas sobre las relaciones entre los conceptos y que evalúan constan- temente con los informantes mediante la recogida de nuevos datos. Como conclusión, se propone una teoría fundamentada, sólida, de alcance medio, tras controlar lo que ya se había escrito sobre el tema y organizar toda la información recogida y contrastada. Dentro del paradigma interpretativo se encuadra el interaccio- nismo simbólico, principal heredero de la Escuela de Chicago y con- tinuador de la tradición sociológica más antigua en Estados Unidos, que se mantuvo vigente durante la hegemonía funcionalista, a pesar de su marginación en gran parte de las universidades de ese país, y que alcanzó uno de sus desarrollos más fecundos en la obra de Goff- man. Por otra parte, también se encuentra la sociología fenomenoló- gica a partir de la obra de Alfred Schütz y y de sus continuadores Ber- ger y Luckman, así como la etnometodología de Garfinkel y Cicourel, que sintetizaron aportaciones de las teorías anteriores ampliando su dimensión práctica. 4.4. E L PARADIGMA HUMANISTA RADICAL Este cuarto paradigma plantea una inversión esencial en los pre- supuestos que definen el paradigma estructural consensualista, pues combina su interés por desarrollar una sociología del cambio radical con un punto de partida subjetivista. De ahí que comparta característi- cas tanto con el constructivismo como el estructuralismo conflcitivista. Con el primero coincide en que su visión del mundo tiende a ser nominalista, antipositivista, voluntarista e ideográfica; con el segundo coincide en su visión conflictivista de la sociedad y en la necesidad de superar las limitaciones de los acuerdos sociales existentes. En cuanto conflictivista, el objetivo de este paradigma se centra en liberar a los miembros de la sociedad de las fuentes de domina- ción, alineación, explotación y represión, para lo cual los humanistas radicales distinguen dos niveles de análisis en su estudio de la reali- dad social. El primero, más superficial e inmediato, se centra en los modos y medios utilizados por quienes detentan el poder para influir sobre los procesos de estructuración que desembocan en la produc- ción de una realidad social cosificada; el segundo, más profundo, se ocupa de la forma como las estructuras cosificadas e incrustadas en el orden establecido afectan la acción humana. c y ll i c e i l a l a s s c r l ll a c t j t e l
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