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EL HOMBRE, SER ABIERTO AL OTRO Y RELIGADO A DIOS… 367 s a - a a - a , , e a a r - a - e - . e a - a e s e ’ - e . obliga a pensar el valor de su vida amenazada. Cae en la cuenta que su existencia no tiene sentido ni valor si está desligada de la realidad transcendente de Dios. Amenazado por el dolor y la imposibilidad de una defensa completamente segura, el hombre busca un apoyo superior más allá de su existencia “terrena”. El hombre, ante el hecho de la enfermedad que sus conocimien- tos médicos no logran curar, puede tomar dos caminos: resignarse esperando el resultado, o rebelarse contra el orden que le hace sufrir. El término de estas dos vías es siempre convergente y coincidente: Dios. “En cuanto la enfermedad existe, pone ante los ojos del hom- bre la constitutiva vulnerabilidad de su naturaleza y le hace sentir la numinosidad tremenda de “lo vulnerante”... para confusión y dolor del alma humana, Dios es también “lo vulnerante”, y así lo muestra la enfermedad” 32 . 2.2. D IOS , MODERADOR DE LA HISTORIA HUMANA El hombre se descubre deudor del pasado. Al hacer su vida paga el estipendio a los que la hicieron antes que el. Esta especie de deuda no se salda con el olvido, sino con una voluntad de comprensión his- tórica. Ya hemos visto como los historiadores han buscado distintas unidades que le ayuden a comprender y encauzar la historia humana. Pero el suceder histórico es tan complejo, que las más de las veces desconocemos los móviles que inspiraron una accion, o por no tener los datos suficientes, o por perdernos en la intimidad metafísica de su protagonista 33 . A pesar le su complejidad, el curso de la Historia tiene un orden, no es un movimiento caótico. La Historia, o se la interpreta como una serie de casos sucedidos al azar, o bien descubrimos en ella una ordenación teleológica que la transciende y le da sentido. La inteligencia humana, atenta a la naturaleza del hombre y a las diver- sas causas segundas de la Historia, llega a descubrir una estructura racional e incluso una cierta previsibilidad del desarrollo histórico. El hombre descubre que sus categorías son demasiado estrechas para 32 Ib ., 113. 33 Cf. ID., Historia de la Medicina , 24ss.

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