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154 JOSÉ ANTONIO LLAMAS MARTÍNEZ tradición se encuentran diseñados los fundamentos del Homo Chris- tianus . Justino delinea dos modelos de hombre: El primero salido del Génesis 1, 2,7; según el cual todo ser humano recibe el soplo divino que le hace ser a imagen de Dios. En dicho soplo va inser- tada la capacidad natural para conocer a Dios. A esta capacidad se refiere Justino hablando de la semilla que los filósofos han recibido del Logos. Pero en sus palabras finales se reconoce la existencia de un segundo modelo de hombre, que es el surgido: “Según la gracia que de Aquel también procede”. Se está refiriendo al nuevo hombre surgido por el bautismo y en la medida que se aplique a alcanzar la semejanza con la divinidad será el hombre cristiano perfecto o gnóstico como lo denominará Clemente. Finalmente aludiremos al filósofo Justino como testigo de una corriente propia de su tiempo como es el Medio-platonismo, de la que es deudor, de acuerdo con el sentido que se desprende de alguno de sus textos. Esta corriente que tiene vigencia durante los dos primeros siglos de nuestra era se caracteriza por mantener una interpretación más metafísica y teológica de Platón. Es esta una de las razones por las que el pensamiento de nuestro autor encaja y es continuación de dicha escuela. De entre los textos que revelan dicha influencia destacamos los siguientes: “Porque el Padre del universo, ingénito como es, no tiene nombre impuesto, como quiera que todo aquello que lleva un nombre supone otro más antiguo que se lo impuso”… “Nombre que comprende también un sentido incognoscible, a la manera que la denominación Dios no es un nombre, sino una concepción ingé- nita en la naturaleza humana de una realidad inexplicable” 20 . Intentando valorar el significado del texto, concluiríamos que hunde sus raíces en otro texto platónico ( Timeo , 28, c), en el que Platón alude a la imposibilidad gnoseológica de explicar al Padre y Creador del universo. Posteriormente el filósofo judío Filón ya se hizo eco de este pensamiento y lo mismo otros autores de la men- cionada corriente medioplatónica, como: Plutarco, Máximo de Tiro, etc. También dicho texto platónico fue repetido por los intelectuales alejandrinos Clemente y Orígenes y por el filósofo cristiano Minucio 20 JUSTINO, Apología II, 5, 3. F l s s s s r c e g 3 3 c g i t r I

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