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EL TRASPASADO. UN TÍTULO CRISTOLÓGICO EN EL CRISTIANISMO… 137 l e a - r . - l , l a - . l e a a - e o s e e 5. EL TRASPASADO COMO TITULO DE LA DIVINIDAD EN EL CRISTIANISMO PRIMITIVO Ayer y hoy los creyentes, nos aventuramos en una tarea mis- teriosa a la vez que ardua. Se trata de conciliar a Jesús de Nazaret, hombre, profeta, Hijo de María con el Cristo de la fe, Hijo de Dios Resucitado para todos. La primera verdad nadie la niega, al ser con- siderado Jesús como una realidad perteneciente a la historia. El pro- blema se plantea con su divinidad. Hoy se pone muchas veces en tela de juicio la divinidad de Jesús de Nazaret. Es más, como afirma Christian Duquoc : «La relación entre el judío Jesús y el Cristo univer- sal es decisiva para la lectura de los fragmentos. Se eluden las cues- tiones planteadas por el diálogo con las otras religiones si se reduce a Cristo a una abstracción, una idea directriz o un ser absolutamente trascendente. Para muchas personas, su resurrección y su título de Hijo exigen esa opción. Su enraizamiento histórico es entonces mi- nusvalorado, perdiendo su incisiva originalidad. M. Ballet lo da así a entender cuando dice: «La escucha de la Palabra [evangélica] oída coincide con la escucha interior… Por eso Cristo no es histórico ni dogmático, ni una imagen para la piedad, sino que es la humanidad misma y el todo» 66 . Lo cierto es que el Nuevo Testamento y sus autores se pregun- taron leyendo la Primera Biblia cristiana, por el sentido de Cristo, o lo que es lo mismo, quisieron responder para los primeros cristianos urbanos el qué, el cómo y el por qué de su identidad y de su origi- nalidad. Para ello, debieron acudir a los procedimientos, las técni- cas, los recursos conocidos por ellos, teniendo en cuenta el sustrato hebreo para comprender y estudiar la Escritura, su familiaridad con el patrimonio bíblico, el conocimiento de la lengua hebrea y de la lengua griega, así como el vocabulario de la sinagoga, la liturgia y todo el vocabulario cultual. También deberían conocer los ritos del mundo romano y del mundo griego y sus mitologías. Esta era la manera de manifestar la divinidad de Jesús en una hora donde otros dioses y otros señores dominaban el espectro geo- gráfico, donde se insertaban los escritos del Nuevo Testamento como 66 C. DUQUOC, El único Cristo. La sinfonía diferida (Santander 2005) 223- 224.