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TITO LUCRECIO CARO, EL PRIMER POETA FILÓSOFO LATINO 65 s , , e o - u , l . - r , l s - n e : l ” a - - mente se trata del Pretor, en cuyo séquito, con otros jóvenes roma- nos, tomó parte Catulo en el viaje a Bitinia entre los años 57-56. Quizá la obra llegada a nosotros, en seis libros, habría tenido mayor desarrollo, si no hubiese fallecido el poeta. La obra, en cuanto género poético tiene carácter didáctico, si bien esta designación sólo se conoce a partir del siglo IV de nuestra era, totalmente desco- nocida en la antigüedad griega y latina, y que hoy se suele vincular con una acepción ajena a la poética. En realidad pertenece a un tipo de epopeya sin armas ni héroes, cuyo primer ejemplo en Roma es la obra de Lucrecio, y cuya larga vida literaria de este género llega, al menos, desde los Trabajos y Días –fundamentos ético-jurídicos de la vida del agricultor– y la Teogonía –historia mítica sobre el origen de los dioses y del cósmos– de Hesíodo (700 a.C.), el arquegueta del género, hasta la época clásica de Roma con Virgilio. Floreció en Grecia, cuando todavía no existía la obra en prosa, y se pro- longó formalmente en la reflexión filosófica de Parménides y de Empédocles, reapareciendo, después de un largo intervalo, dentro del Alejandrinismo (323-31 a.C.). Aquí hubo epopeyas de este tipo para todo lo imaginable: los Phainómena de Arato (siglo III), des- cribiendo el cielo y sus astros; Sobre mordeduras y picaduras de animales (Theriaká) y Sobre venenos y antídotos (Alexiphármaka) de Nicandro (275 a.C.), médico, poeta y sacerdote del Templo de Apolo en Claros junto a Colofón, sin olvidar sus obras perdidas Sobre Agricultura (Georgiká), y Metamorphóseis, inspiración para la Geórgica de Virgilio y las Metamorphosis de Ovidio. A la misma época alejandrina pertenece la epopeya sobre Gastronomía de Arquéstrato 2 , siglo IV a.C. Sin duda conectó Lucrecio con el manierismo de estas epope- yas alejandrinas sobre temas tan ásperos, especializados y técnicos, cuando en el Proemio al Libro IV se precia de haber abierto una materia desacostumbrada y acometido el tratamiento de temas oscuros con versos luminosos, aunque esta autoestima se hace con menor énfasis que en Virgilio, con su noble orgullo de haber intro- ducido en Roma el Ascraeum carmen 3 , el tema geórgico, aludiendo 2 Ed. de P. BRAND, Corpusculum poesis Epicae Graecae ludibundae (Leipzig 1888) 114. 3 Geórgicas , II, 176. Se refiere a los Trabajos y Días de Hesíodo.
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