NG200603003

mucho mayor que lo lejano: la ignorancia es como ese efecto ópti- co que nos hace creer que las cosas son tal como las vemos, o más bien esa ilusión intelectual que nos lleva a pensar que vemos las cosas tal como son. Esta búsqueda de la mayor felicidad posible se establece, como hemos visto, por comparación. Pero lo que se compara no es la cali- dad sino la cantidad. El placer es mejor que el dolor, luego lo que se pretende es minimizar el dolor y maximizar el placer. “ ¿No os parece que esta apreciación del exceso o del defecto o de la igualdad de uno respecto de otro es, ante todo, un arte de medir ( metrhtikhv ) ?». «Necesariamente». « ¿Y que en cuanto arte de medir es también nece- sariamente un arte y un saber ( tevcnh kai; ejpisthvmh ) ? «Lo concedie- ron así»” 11 . Este arte de la medida, este cálculo hedonístico, como suele denominarse, es un saber. Escogeremos un dolor que nos pro- porcione placeres futuros o nos libre de dolores mayores. Y al con- trario con el placer. El arte de la medida es una de las señas de identidad platóni- cas, reflejo de su infinita confianza en la ciencia y la racionalidad, capaz de apartar al hombre tanto del dominio de la tuvch como de la falsedad y de las opiniones que se toman por verdaderas sin fun- damento real. Fue mencionado ya en el Eutifrón , para mostrar la dificultad de ponerse de acuerdo en asuntos que no admiten medi- ción 12 . También, como veremos, aparece en el Filebo . Pero especial- mente interesante resulta el pasaje del libro X de la República , a pro- pósito de las ilusiones y engaños de los sentidos y la exactitud de la medida y el razonamiento. Y es que esta precisión o ajkribeiva resul- ta ser un requisito indispensable de toda tevcnh . Es conocido el ejemplo del palo que, al introducirlo en el agua, parece torcerse. Cuando vemos un objeto desde lejos, no acertamos a descubrir su tamaño exacto, de ahí que los sentidos no proporcionen una infor- mación tan extraordinariamente fiable como la que otorga el cono- LA EVOLUCIÓN DE LA TEORÍA PLATÓNICA DEL PLACER 607 11 Ib ., 357b. 12 PLATÓN, Eutifrón , 7c: “ «¿Y si disputáramos sobre lo mayor y lo menor, recurriríamos a medirlo ( metrei`n ) y, en seguida, abandonaríamos la discusión?» «Muy necesariamente»”. Parece que lo bello, lo justo y lo bueno no son susceptibles de medirse según este patrón cuantitativo; ya en este temprano diálogo se intuye la necesidad de patrones estables, sin los cuales el conocimiento de la justicia y la bon- dad sería imposible.