NG200603001

3.1. El amor a Dios (v.19-24) Con este título hago referencia a la respuesta que el limitado amor humano da al gran Amor de Dios. Francisco invita a los fieles a responder a Dios con decisión: “ Amemos, pues, a Dios y adorémos- lo con puro corazón y mente pura, porque esto es lo que sobre todo desea cuando dice: Los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y verdad” (v.19 ). Una respuesta que se asemeja a la pro- puesta por Jesús a la samaritana: el Padre es el término de la adora- ción de todo varón y mujer y no el Templo de Jerusalén; pero para adorarle hay que aceptar incondicionalmente a Jesús como el reve- lador del Misterio trinitario. Y esto sólo es posible si nos mueve el Espíritu Santo, por ello Francisco añade que “ todos los que lo ado- ran, es preciso que lo adoren en espíritu y verdad” 247 . Este amor a Dios se va a desarrollar de dos maneras en el texto. Una parte de la oración, y la otra de los sacramentos; una más directa y la otra mediada por la comunidad. 3.1.1. El amor oracional “ Y dirijámosle alabanzas y oraciones día y noche, diciendo: Padre nuestro, que estás en los cielos, porque es preciso oremos siem- pre y no desfallezcamos” (v. 21). La oración es la propuesta primera que nos hace Francisco para devolver a Dios su Amor. Él mismo “ se esforzaba, orando sin interrupción, por mantener siempre su espíri- tu unido a Dios” (Leyenda Mayor 10,1). Para Francisco es la relación inmediata con Dios que exige la total disponibilidad de uno mismo a sus planes y a su modo de proceder. La 2CtaF habla varias veces de la oración y, por eso, en las conclusiones trataremos de ella. En este caso, está situada al inicio de la vida en penitencia, lo que le confiere la misma fuerza de relación que se da en el encuentro entre el Padre y su hijo pródigo 248 . LA CARTA A TODOS LOS FIELES: EL FUNDAMENTO…(II) 449 prendido de las cosas materiales, como se ha dicho, no puede amar verdaderamen- te ni a Dios ni al Prójimo”. M. EL CONFESOR, O.c. , nota 45, 6. 247 S. CASTRO, Escritos joánicos (Madrid 1997/98). 248 (Cf . Lc 15, 18-19).