NG200602002

Yahvé nos ha abandonado y nos ha puesto en manos de Madián. El ángel de Yahvé se volvió a él y le dijo: “Ve y con esa fuerza que tú tienes libra a Israel de las manos de Madiám; ¿no soy yo quien te envía?” (Jc 6, 11; 12 y 14). 2. Caso claro en el que se entremezclan Yahvé y el ángel de Yahvé es el siguiente: La mujer de Manóaj era estéril y se le apare- ció el ángel de Yahvé : El ángel de Yahvé se apareció a la mujer y le dijo: “Eres estéril y sin hijos, pero vas a concebir y parirás un hijo... Oyó Dios la oración de Manóaj y volvió el ángel de Dios a la mujer de Manóaj, cuando estaba sentada en el campo y no estaba con ella su marido... El ángel de Yahvé dijo a Manóaj: “La mujer que se abs- tenga de cuanto la he dicho”... Manóaj dijo al ángel de Yahvé : “Te ruego que permitas que te retengamos mientras te traemos prepara- do un cabrito. El ángel de Yahvé dijo a Manóaj: “Aunque me reten- gas no comería tus manjares; pero si quieres preparar un holocaus- to, ofréceselo a Yahvé”. Manóaj, que no sabía que era el ángel de Yahvé, le dijo: “¿Cuál es tu nombre, para que te honremos cuando tu palabra se cumpla? El ángel de Yahvé le respondió: “¿Para qué me preguntas mi nombre, que es admirable? Manóaj tomó el cabrito y la oblación para ofrecérselo a Yahvé en holocausto sobre la roca, y sucedió un prodigio a la vista de Manóaj y de su mujer.. Cuando subía la llama de sobre el altar hacia el cielo, el ángel de Yahvé se puso sobre la llama del altar. Al verlo Manóaj y su mujer, cayeron rostro a tierra, y ya no vieron más al ángel de Yahvé . Entendió entonces Manóaj que era el ángel de Yahvé, y dijo a su mujer: “Vamos a morir porque hemos visto a Dios”. La mujer le contestó: “Si Yahvé quisiera hacernos morir, no habría recibido de nuestras manos el holocausto y la oblación, ni nos hubiera hecho ver todo esto, ni oír hoy todas estas cosas” (Jc 13, 3.9.13.15.16.18.20.21). Hemos ofrecido, con la amplitud requerida, un caso claro en el que se entremezclan Yahvé y el ángel de Yahvé: la mujer de Manó- aj era estéril y se le apareció el ángel de Yahvé : a veces es llamado “hombre de Dios”, “el hombre”, el ángel de Yahvé se puso sobre la llama “producida por el holocausto ofrecido, es identificado con Yahvé” (v. 22). El hijo concebido, tan esperado y anunciado era San- són. Simboliza al Dios incomparable ( 2R 1,3.15 ). 3. Moisés siente curiosidad ante la contemplación de la zarza que ardía sin consumirse (Ex 3,27). El intercambio entre Yahvé , el 308 FELIPE FERNÁNDEZ RAMOS