NG200602002

refiere a la necesidad de una sistematización de los seres divinos mencionados cuando ella no es necesaria. Y no lo es nunca. Una visión de esta nueva representación del mundo nos la ofre- ce el libro de Job, que habla de los ángeles sin pretensiones dogmá- ticas. El juicio sobre su ser lo expresa mediante la designación de “santos” (= Kedosim ) ( Job 5,1; 15,15; Sal 89,8: “Es terrible Dios en la congregación de los santos , grande y formidable más que cuantos le rodean”. “Cantad a Yahvé un cántico nuevo; cantadle en la asam- blea de los santos ” (Sal 149,1). “...y vendrá entonces Yahvé, mi Dios, y con Él todos sus santos” (Za 14,5). “Entonces oí hablar a uno de los santos , respondiendo a otro santo , que le preguntaba... (Dn 8,13) . Expresiones semejantes se encuentran frecuentemente en el Salterio: La profecía , en cuyo anuncio se hallan mezclados muchos mito- logúmenos, muestra el camino indicado de manera especial, aunque sus expresiones no puedan generalizarse. Ezequiel es el primer pro- feta en cuyas afirmaciones aparece un ser intermedio (= ish ). “Fuéme dirigida la palabra de Yavé, diciendo: Hijo de hombre ...(= ish)”. Llevóme allá (a un monte altísimo) y un varón de aspecto como de bronce bruñido, que tenía en su mano una cuerda de lino y una caña de medir, estaba en pie a la puerta. Díjome aquel varón: “Hijo de hombre (= ish), mira con tus ojos y atiende con tus oídos y pon tu atención a lo que yo te vaya mostrando, pues para que te lo haga ver has sido traído y para que se lo cuentes todo a la casa de Israel” (Ez 1,2; 40,3-6). Un nuevo mundo aparece en Zacarías: el malak Yahve hace las veces de angelus interpres : “ El ángel de Yahvé conjuró a Josué, diciendo: Así habla Yahvé Sebaot: Si andas por mis caminos y eres fiel a mi ministerio, administrarás también mi casa y guardarás mis atrios, y yo te daré puesto entre estos que están aquí” (Za 3,6-7); nos ofrece también visiones de mensajes celestes a caballo y de carpin- teros y trabajadores de la forja (visión primera y segunda); la cuarta visión nos describe al ángel de Yahvé , que tenía a su diestra a Satán. Todos los ángeles se hallan a las órdenes de Yahvé. Los salmos tardíos y el código sacerdotal se hallan en contra de la convicción del crecimiento de los seres celestes. En la época inmediatamente posterior al exilio no tenemos mucha información. DIOS Y SU CORTEJO ANGÉLICO 325

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