NG200602002

ser el caudillo: “Yo mandaré delante de ti un ángel , que arrojará al cananeo, al amorreo, al jeveo, al fereceo y al jebuseo. Sube a la tie- rra que mana leche y miel, pero yo no subiré contigo, porque eres un pueblo de dura cerviz, no sea que te destruya en el camino” (Ex 33,2- 3 ). También aquí el ángel de Yahvé es un funcionario de la alianza de la gracia; Yahvé esconde su santidad ante Israel y le concede el ángel custodio. 12. Junto al ángel de Yahvé , en la concepción antigua de Israel, existen otros seres celestes , que sólo en casos raros son designados como mensajeros (= melakim ). Por ejemplo los de la escala de Jacob (aunque no vayan precedidos del correspondiente vocablo en plu- ral), o “los artesanos de Yahvé” que entran y salen de su presencia. Se llaman hijos de Dios ( = bene haelohim ), que podrían ser consi- derados como “seres divinos” 28 . La palabra “hijo” no debe ser entendida en modo alguno en el sentido físico-genealógico, sino con el significado de “perteneciente a”. La creencia de que Yahvé estaba rodeado de un ejército de seres celestes, al que ayudaban en el gobierno del mundo, le alababan y cumplían sus deseos es corriente en el Israel pre-exílico; pero raras veces son percibidos sensorialmente por los hombres. Una peculia- ridad de este cortejo de Yahvé es el aspecto guerrero de su apari- ción: “Jacob prosiguió su camino, y le salieron al encuentro ángeles de Dios. Al verlos, dijo Jacob: “Este es el campamento de Dios; y por eso llamó a aquel lugar Majanaím (Gn 32,2-3 : se trata de preparar la lucha, cara a cara con Dios). “Estando Josué cerca de Jericó, alzó los ojos y vio que estaba un hombre delante de él, en pie, con la espada desnuda en la mano; y Josué se fue hacia él y le dijo: ¿Eres de los nuestros o de los enemigos?” (Jos 5,13 : se trata de una teofanía; se aludiría a las órdenes dadas a Josué en orden a la conquista; podemos hablar de un paralelismo con el Exodo; la voz oída aquí por Josué sería, de algún modo, para- lela a la zarza vista por Moisés en la que recibiría órdenes militares semejantes a las comunicadas aquí a Josué. “Desde los cielos combatieron las estrellas; desde sus órbitas lucharon contra Sísara” ( Jc 5,2 : una expresión similar del apoyo 322 FELIPE FERNÁNDEZ RAMOS 28 H. A. MERTENS, O.c., 634-636.