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I. ANTECEDENTES DE LA ANÉCDOTA NARRADA El problema o la cuestión que me planteó el hermano Santiago se remonta a los orígenes de la humanidad. Al menos desde Home- ro existía la preocupación por comprender la naturaleza de los mensajeros . Su existencia no necesitaba demostración. Eran algo así como la anticipación de los actuales carteros dependientes en su ofi- cio de una oficina central. Su naturaleza podía ser entendida desde el oficio que desempeñaban. Los mensajes que debían transmitir eran un medio esencial para establecer la comunión entre los hom- bres. Por eso los mensajeros participaban de una cierta sacralidad vinculada a su cargo y nadie dudaba que se hallaban bajo una espe- cial protección de los dioses. 1. Sófocles, en Las Traquinias, una de sus obras dramáticas conservadas, cuya acción transcurre en Traquis (Tesalia), nos ofre- ce una interesante descripción del mensajero servicial. Transmite alegría, y los receptores de la misma se atreven a hacerle más pre- guntas, que él contesta. Como mensajeros que los dioses envían a los hombres para realizar un servicio esencial, participan de la cele- ridad divina y son comparados por ello a las aves y a los ángeles. Hemos aludido a la sacralidad de los mensajeros. Esto les con- vierte en el prototipo de los ángeles celestes . El ángel celeste es Her- mes, el dios griego de los mercaderes, el enviado de los dioses ( Hch 14,12: “La muchedumbre, al ver lo que había hecho Pablo, levantó la voz diciendo en Licaonio”: dioses en forma humana han descen- dido a nosotros, y llamaban a Bernabé Zeus y a Pablo Hermes, por- que éste era el que dirigía la palabra” ) y guía de los muertos; su nombre latino es Mercurio. Como animador de los muertos, recibe Hermes el título de ángel. Platón hizo el esfuerzo de unir su nom- bre con la misión que desarrollaban. Nemesis, la diosa griega de la justicia distributiba es llamada ángel de castigo, y el mismo nombre recibe Hekate , la diosa del hechizo o del embrujo, situada junto a Nemesis . Además de los ángeles celestes existen ángeles terrestres (¿los dominadores del sheol ?). Estos ejemplos nos sitúan en el tiempo posterior al cristianismo y esto podría significar la posibilidad, al menos, de la influencia de 302 FELIPE FERNÁNDEZ RAMOS