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ran en ellas hasta el fin 80 , bendígales el Padre, y el Hijo, y el Espíri- tu Santo. Amén. INTRODUCCIÓN: ANÁLISIS Y SITUACIÓN DE LA CARTA A TODOS LOS FIELES La Carta a todos los fieles es, ante todo, un documento escrito; una asociación de ideas y experiencias con las que Francisco inten- ta comunicar “ las palabras de nuestro Señor Jesucristo, que es el Verbo del Padre,” (2 CtaF 3 ). Son palabras de Dios escritas por mano humana y siguiendo un código lingüístico; por lo que ha de estu- diarse como cualquier texto literario del s.XIII. Su fin es ser la pauta de vida para aquellos cristianos que se sienten llamados a vivir en penitencia. Francisco lo expone por medio de “ las palabras del Espí- ritu Santo, que son espíritu y vida “, al estilo de los escritores sagra- dos a los que el Espíritu inspira la voluntad Dios para cada varón y mujer, en cada época y situación. El texto al que me enfrento tiene dos ediciones: una, la más corta, parece ser de 1215, y otra, la mas larga, parece situarse en torno a 1221 81 . Voy a escoger la segunda redacción, conocida como 2 CtaF, porque la 1 CtaF está contenida en ella (de manera que muchos versículos son citas literales de la primera) y porque expre- sa, pedagógicamente, el proceso de crecimiento espiritual de Fran- cisco. Esta segunda redacción es un escrito auténtico de Francisco que se conserva en los códices más antiguos, está en sintonía con el resto de los Escritos de Francisco y las biografías franciscanas 82 . LA CARTA A TODOS LOS FIELES: EL FUNDAMENTO…(I) 245 80 Mateo 24,13. 81 K. ESSER, Un precursore della “epistola ad fidelis” di san Francesco d’As- sis, en Analecta TOR 129 (1978) 1147. C. IZQUIERDO, Fuentes históricas de los her- manos y hermanas de la penitencia de san Francisco de Asís (Palma 1997) 120. 82 Los escritos de Francisco son: las Admoniciones, las alabanzas al Dios Altí- simo, las bendiciones, la Regla no Bulada, la regla para los Eremitorios. el saludo a la bienaventurada Virgen María, el cántico de las criaturas, las Cartas, el oficio de la Pasión del Señor y el Testamento. Las Cartas se dirigen a: san Antonio, a la autori- dades de los pueblos, 1 y 2 a los clérigos, 1y 2 a los custodios, 1 y 2 a todos los Fie- les, a Fr. León, a un ministro y a toda la Orden.