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ticulturalidad, esto se puede mantener sustancialmente; pero inde- pendientemente a esta cuestión, nos pone en aviso de una labor de racionalidad en el seno de las religiones. Por lo tanto, vemos cien- cia en la religión. La teología implica en las religiones la tarea de realizar un discurso sobre la racionalidad y la explicitación de la manifestación religiosa, la religión empírica de la que se sustenta. Una labor que siendo muy dependiente de la relación entre religión y cultura occidental, sobre todo, grecolatina, no se agota sólo en el pensamiento cristiano, ni monoteísta. Encontramos teología cristiana católica, protestante y anglicana; pero, también, discursos y escue- las teológicas en el Judaísmo, el Islam, el Hinduismo y el Budismo. Quizás no tan pegadas a la racionalidad grecorromana, pero sí en una metodología hermenéutica de otras raíces, como son otros los supuestos epistemológicos y metafísicos del pensamiento oriental 35 . No podemos, por ejemplo, negar la riqueza teológica del Islam, donde logramos reconocer escuelas fecundas antaño y en grupos contemporáneos, como la teología esotérica no-racional, los trabajos racionales del chiísmo (Escuela de Bagdad) 36 , o los estudios teológi- cos de filiación jurídica 37 . De modo claro aparece el estudio teológi- co en el judaísmo que nace de la propia experiencia bíblica y se extiende a la interpretación talmúdica, si bien no de una forma sis- temática. La reflexión teológica judía se enriquece con el contacto de la filosofía grecorromana con Filón de Alejandría, va acrecentan- do su especulación durante la Edad Media y podemos reconocer su CIENCIA Y RELIGIÓN: ¿ES POSIBLE EL DIÁLOGO?… 543 35 Citemos algunos estudios al respecto. Cf. J. L AGERWEY , Du caractère ration- nel de la religion locale en Chine , en Bulletin de l’École française d’Extrême-Orient 87 (2000) 301-315; H. O. R OTERMUND (dir.), Religions, croyances et traditions populai- res du Japon (Paris 2000). Una visión del Consejo Asesor del Parlamento de las Reli- giones del Mundo patrocinado por la Unesco, nos puede mostrar personas dedica- das al estudio teológico de estas religiones http://www.unescocat.org /prm2004/esp/consellassessor.html. 36 Existe un trabajo bien definido de estudio sobre la teología musulmana en diversos países. Podemos citar algunos estudios de autores relevantes. Cf. M. A. A MIR -M OEZZI , Le Guide divin dans le shî’isme originel. Aux sources de l’ésotérisme en Islam (Lagrasse 1992); I D ., Seul l’homme de Dieu est humain. Théologie et anthropol- gie mystique à travers l’exégèse imamite ancienne (Aspects de l’imamologie duodéci- maine IV) , en Arabica 45 (1998) 193-214; I D . y J. S CHEID (ed.), L’Orient dans l’histoi- re religieuse de l’Europe. L’invention des origines (Turnhout 2000). 37 Cf. M. H. B ENKHEIRA , L’amour de la loi. Essai sur la normativité en Islam (Paris 1997).

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