NG200501004

Si el sentimiento es característico de la religión, y éste a su vez, como sublime puede en Kant cumplimentar la naturaleza humana y llegar a lo absoluto, existe un elemento en el hombre que expresa ese sentimiento: el símbolo. Llegados a este punto nos formulamos ahora la siguiente pregunta: ¿puede la simbólica en Kant llegar donde no pudo con la razón crítica y donde la razón práctica no pudo sino suponer como postulado? c) L A SIMBÓLICA KANTIANA Kant reconoce una facultad en el hombre para captar lo bello y lo sublime. Junto a la razón y la percepción, el juicio estético es la dimensión racional en el que podemos alcanzar una dimensión de la realidad estético-expresiva 28 . La Tercera crítica es la crítica del sentir, lo que no significa que Kant realice una reflexión sobre los juicios de los sentidos fundados en las sensaciones, sino que efectúa un análisis de los juicios de la reflexión: de los juicios sobre lo bello (caracterizados por ser limita- ción del objeto) y los juicios sobre lo sublime (que concierne a lo ilimitado). En este sentido, lo sublime violenta la imaginación des- bordando las propias facultades sensibles. Lo sublime, su referencia suprasensible e ilimitada, nos lleva al espíritu. La representación de las ideas de la razón que despierta la naturaleza (no la representa- ción en sí de la naturaleza) es lo que nos hace ver lo sublime, ellas son sublimes: “Dos cosas llenan mi ánimo de una admiración y veneración siempre nuevas y crecientes en la medida que la refle- xión piensa y se aplica sobre ellas: el cielo estrellado por encima de mí y la ley moral en mí. Estas dos cosas (...) las veo delante de mí y las uno inmediatamente a la conciencia de mi existencia” 29 . Kant declara sublimes tanto el cielo como la ley moral. Lo sublime expresa lo más alejado del fenómeno sensible, y lo más interno en mí (no sólo el sujeto trascendental, sino el sujeto preñado de exis- tencia), la vía interior de la razón. El cielo estrellado presenta lo 184 MANUEL LÁZARO PULIDO 28 Cf. J. M. MARDONES, La vida del símbolo. La dimensión simbólica de la religión (Santander 2003) 44 29 KpV ., Ak , V, 161-162.