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espiritual sino también un documento inspirado en la Regla bulada de San Francisco, el mismo que logró le fuera aprobado por el Pontífice 2 . El problema que se plantea es si la Regla o Forma vitae dicta- da por Clara nació ex nihilo en aquel período; en efecto, hay serios indicios de carácter interno y externo que hacen suponer la exis- tencia, ya desde 1224, de un documento bastante completo, muy cercano en su contenido y en su forma al que quedara involucrado en la bula de 1253, el cual debió guiar la vida de las Damianitas durante los años precedentes. Aunque varios estudiosos de las pri- meras décadas del siglo XX advirtieron la existencia de tales indicios, ocupándose en parte de ellos, fue quizás Zefirino Lazzeri el prime- ro en afrontar abiertamente la problemática en un estudio publica- do con motivo del VII centenario de la muerte de santa Clara 3 , proponiendo soluciones sobre las cuales no existen, que sepamos, reacciones consistentes por parte de otros estudiosos. No obstante las dificultades implícitas en las hipótesis planteadas por Lazzeri, las quisiéramos colocar de nuevo sobre el tapete, al menos para hacer ver que aún no se ha dicho la última palabra sobre la fecha de redacción de la Forma vitae Sororum Pauperum . Antes de entrar de lleno en la problemática planteada por Lazzeri, conviene tener en cuenta que la RegC tiene su gestación en el contexto de un largo y no menos complicado iter histórico, en el que las exigencias eclesiásticas, mezcladas con la solicitud paternal de cardenales y pontífices, se enfrentan con la férrea decisión de fidelidad al ideal evangélico que Clara había aprendido del Pobrecillo de Asís, particularmente en el campo de la pobreza. De este proceso se han ocupado con competencia varios estudiosos ya desde comienzos del siglo XX, cada uno con sus propios énfasis y 912 FERNANDO URIBE 2 Cf. L. O LIGER , « De origine Regularum Ordinis S. Clarae », en Archivum Franciscanum Historicum [ ArchFrancHist ] 5 (1912) [181-209; 413-447], 434-435. Casi todos los estudios posteriores prolongan de alguna manera esta misma opinión. Para la aprobación de la RegC cf. E. G RAU , « Die päpsliche Bestätigung der Regel der hl. Klara (1253) », en Franziskanische Studien [ FranzStud ] 35 (1953), 317-323. 3 Cf. Z. L AZZERI , « La «Forma vitae» di S. Chiara e le Regole sue e del suo Ordine », en Santa Chiara d’Assisi. Studi e cronaca del VII Centenario, 1253-1953 , (Assisi 1954) 79-121.

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