NG200403009

tiene que ver con lo que es una consideración objetiva sobre la rela- ción alma y cuerpo en el hombre. En definitiva: que es un plantea- miento de carácter esencialista realizado con la pretensión, o en la dirección de tratar, primordialmente, de dilucidar el problema sobre la esencia del hombre o sobre « qué » es el hombre. Sin embargo, en el estudio de la vida o de la existencia huma- na, desde las demandas de determinados autores que, dicho sea de un modo general, acostumbramos a enmarcar dentro de la Filosofía de la vida y la Fenomenología y, de manera especial, a partir de la ontología de la existencia llevada a cabo por el mentor principal de ésta, Martin Heidegger, la perspectiva desde la que es reivindicado el análisis de la problemática humana adquiere un giro ontológico, de carácter existencial, y por tanto fundamental, al procederse, en esta nueva perspectiva, desde una base contrapuesta a lo que repre- senta, o significa, el punto de vista lógico o conceptual de la consi- deración objetiva del hombre. Y, de este modo, a la demostración esencialista tradicional, y por ende objetivista, del hombre como compuesto de alma y cuerpo sucede, lo que cabe calificar de expe- riencia de la vida, o de mostración o fenomenología de la existen- cia humana. Dicho con otras palabras, y sirviéndonos aquí de dos aspectos destacados por la ontología fundamental heideggeriana: frente, y previamente, al qué (was ), o a la esencia, de la Filosofía tra- dicional en el análisis de lo que normalmente, o sin más (es decir, pasando por alto matizaciones terminológicas del filósofo de la exis- tencia sobre el término realidad), denominamos realidad humana, queremos señalar que con la Filosofía de la existencia pasa a ocu- par, a un nivel además primordial, el primer plano en el estudio del ser humano el cómo ( wie ), o la fenomenología de la existencia humana. A lo largo de la gran síntesis del conocido como pensamiento del «primer Heidegger», en efecto, que es la obra Ser y Tiempo , la contraposición a que estamos aludiendo entre los planos ontológico y lógico en el estudio del ser del hombre (aunque Heidegger, como es sobradamente sabido, prefiere hablar a este respecto mas bien de Dasein = ser ahí, ser existente, o simplemente existencia) es algo medular en dicha obra. Pero, además, la dicotomía lógica, o episte- mológica, de la tradición filosófica, centrada durante siglos en la oposición entre sujeto y objeto, queda relegada para el filósofo fri- 564 JOSÉ LUIS RODRÍGUEZ MOLINERO