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!.-FECHAS HISTORICAS DE LA PROVINCIA CAPUCHINA DE CASTILLA La Provincia Capuchina de Castilla ve en San Lorenzo de Brindis a su glorioso Fundador. Efectivamente, la presencia del Santo en la Corte de España resolvió las dificultades que se venían oponiendo a la entrada de los Capuchinos en la capital. El 12 de noviembre de 1609 se estableció, en el Hospital de los Italianos, la pri– mera Comunidad Capuchina de Madrid. El Capítulo General reunido en junio de 1618 decretó la erección y constitución canónica de la Provincia Capuchina de la Encarnación de las dos Castillas. En octubre del mismo año se celebraba el primer Capítulo Provincial en el convento de El Pardo. Poseía• entonces la Provincia 8 conventos. En 1625 la regió~ andaluza se separaba de Castilla para formar la Custodia de. Andalucía. Él Breve pontificio Apostolicae caritatis (24-7-1747) dividió la Provincia en las tres Custodias de Madrid, Toledo y Valladolid. Aunque cada una de las Cust9dias tenía conventos determinados, no había entre ellas división alguna, ni material ni formal. El desarrollo de la Provincia alcanza su punto culminante en 1782; contaba en– tonces con 21 conventos y 510 religiosos. El descenso es notable ya a fines de siglo. José Bonaparte suprimió, con decreto del 18 de agosto de 1809, todas las. Or– denes Religiosas existentes en España. La Restauración se inició en diciembre de 1813; pero ya el 11 de octubre de 1836 apareció el nuevo decreto de supresión del Ministerio Mendizábal. Para organizar de alguna manera a los Capuchinos españoles exclaustrados se creó un Comisariato Apostólico (30-3-1838), que existió hasta la erección de la Pro– vincia del Sagrado Corazón de Jesús, que comprendía todas las casas de Capuchinos de España (4-2-1885). El 18 de diciembre de 1889, el Rvdmo. P. General, Bernardo de Andermatt, dividía en tres la única Provincia española. Una de ellas fué la Provincia del Sagrado Corazón de Castilla, a la que que se asignaron los siguientes conventos: Bilbao (Curia Provincial y convento Noviciado), Fuenterrabía y León (colegios), Montehano y Lecároz. Su desarrollo progresivo aparece manifiesto en el cuadro sinóptico y estadístico que llena un apartado de esta Estadística (págs. 23-25). Un período doloroso fueron los años 1936-1939, durante los cuales los revolu– cionarios le ocuparon varios conventos y martirizaron 22 religiosos. 6

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