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Obstáculos, y medios para vencerlos. 61 á la conciencia, sera resistirla por conciencia; pues por seguir una conciencia razonable y decisiva, resiste á una couciencia escrupulosa é incierta XXI. Hagamos ahora este razonamiento de otra suerte, para hacerlo mas sensible. No estamos siempre obligados a hacer lo mas se- guro, lo que mas nos arrime á Dios, y lo que nos aparte mas del pecado; sinó solo aquello que nos parezca Mejor fundado , mas razonable , y lo que la prudencia cristiana nos dice que debemos ejecutar. Esla virtud tiene sobre nosotros un imperio tan absoluto, y tan extremadamente dulce que, ella sujeta á la conciencia misma; porque esta no es la regla de nuestras acciones, sinó en cuanto la pru- dencia la dirige. La razon, pues, y la pru- dencia dicen á los eserupulosos, despues de los santos y los Aulores morales, que nada pueden hacer mejor que obedecer, á pesar de sus temores y de sus dudas; con cuya obe- diencia obran sábia y prudentemente; y de una manera irreprensible; áun cuendo á fondo, 0 por error, ó equivocacion , ó culpa del Con- fesor , Ó por la pureza de su Obediencia sé apartasen de la Ley. Pero abreviemos este ra= zonamiento, para que pueda entrar con mas facilidad en los entendimientos preocupados de los eserupulosos, Todo lo que hace con una verdadera y en- tera buena fé, cuando fuera materialmente contra la Ley de Dios, no es pecado; antes bien es Pbra buena, si se hace por buenos