BFCANT00059270000000000000000

A O AR ae ERRE PORT venid o 4 3 ' | ] a EARL ADM NA 200 Paz interior. quilamente diciéndole : « Esta estrito : Adora- »rás al Señor tu Dios, y le servirás á El solo.» ¿Habeis de sorprenderos flacas criaturas? ¡ Par- tos de corrupcion ! ¿Os sorprenderéis de ve- ros capaces de alguna sugestion' infame? El horror que concebis ¿debe ser la materia de una turbacion tan peligrosa? ¿Y ha de ser negesario hacer tantos esfuerzos para recha- ES, ¿ 2 : MarrícrLo nu. eriór en las tentaciones contra 47 la honestidad. contrario ála modestia el que os aflige? Yues- tra turbacion es supérflua , porque estos á nadie sorprenden. Esta suerte de tentaciones son del número de aquellas , de las cuales las almas timoratas se ven frecuentemente enves- tidas, Ellas quieren que el fondo viciado de su naturaleza , les produzca ó les fomente lo que es. mas puro en lo que se complace; y se alligen de sentir en si los pensamientos y la impresiones , que: no. lo son. El mismo san Pablo , que sufrió con tanta paciencia sus mas Íuriosas persecuciones y los tratamientos mas crueles , no pudo dejar de quejarse a Dios por estos ataques de Satanás; y le pidió muchas veces que lo librase de esta tribulacion. Todo

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz