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2 Paz Interior. paz interior ;, parque como diee un Profeta , el lugar de su habitacion es la'paz 1. Mas no se ha de entender por esto , que Dios no habita en el alma de un Justo que padece estas turbaciones: sinó que en ella'no está com toda confianza y seguridad, por cuanto la confusion que ad- vierte , no'le deja entretenerse familiarmente con ella; y asi habita en ella, al modo de un forastero que está de huesped, el que viendo la casa turbada, se-considera proximamenté umenazado a dejarliiÓ ser despedido de ella. A mas de esto, el alma, que se halla agitada violentamente , Hb esti por lo comun sólida- mente establecida ef la justicia; pero la que Conserva esta puz por largo tiempo, es como una casa fundada sobre peña, á prueba de borrascas y uracanes: y a esta la elige Dios por su habitacion con placer y seguridad ;£y esta es la que quiere que se le edifique, como lo espresa en la Sagráda Escritura 2, donde pueda tener una” mansion permanente y fija; poco satisfecho de los' Pabellones ó tiendas de Campaña, que se arman por la tarde y se des- arman por la mañana, y á cada viento Se, mue- ven; Porque nada tienen de sólido: simbolos verdaderos de un alma, á quien mudan infinitas veces la turbacion, alteran las pasiones , y la hacen siempre desigual y diversa de si misma. Tambien los Santos padecen algunas yeces 4 Factus est. in: pace ¿locus ejus Psalm, 715., Y 3. — 2 Nunquid tu edificabis mihi domum ad habitandum? 2, Reg. coo. 7, Y. 5