BFCANT00059270000000000000000

Medios para adquirirla. 97 pero tambien sus movimientos son menos per- ceptibles; y esta peña tienen de mas los que quieren escitar a fuerza sus afectos y i6cgu- rarse en sus disposiciones. Esto consiste en conocer poco a la naturalezá, en pensar day la determinacion con el movimiento del cuér- po, y en creér que ama porque se enterneces pero esta ternura no está sinó en la sangre y en Jos órgaños, que no son el asiento del sagrado amor. Todo es dulce y moderado en el servicio de Dios: nou pide que se fatigue la cabeza, nj que se consuma el pecho por los esfuerzos desordenados ; ni quiere por con- secuencia poner al entendimiento en tortura pera sujetar la inconstancia; ni al corazon, por decirlo asi, bajo una prensa, para espri- mir los afectos; y estos movimientos produci- rian un efecto todo contrario; porque el co- razon quiere estar á su libertad; y «esto que se Ccreeria alguna vez efecto del amor de Dios y del celo de su servicio , no seria ni lo uno ni lo otro; y asi seria procurarse la ilusion del entendimiento, por el turmento del cuerpo y del alma. Mas aún: ¿Es verdaderamente el amor de Dios el que buscamos con todos estos esfuer- 208? No. Esta es nuestra propia satisfaccion. Dios no nos pide sinó la sólida preferencia, lu conducta uniforme , la tranquilidad del alma, la apacible sumision á las ordenes desu Pro- videncia, el celo atento sin ser apresurado, para eumplir su voluntad conocida; y nos- otros parariamos aquí si no buscásemos otra