BCPAM00543-3-16(4)000000

8 la vanidad en' él nó ' se ven 'sino feroces' J el> useos, crueles Amorreos , y astutos Gabaonitas , gigantes mónsrr.uosos que · aterran y pérsiguen al <levoto Is– raelita , que carnina á la · tierra de promision : de este gran mUndo ha . sacado el Señor a est-Os jó– venes, y los ha traido al asilo de la salud, la Re– ligion . Capuchina; en donde nos ponemos á cubierto contra tddos .su_s escollos, lazos, peligros y : engaños; porque ella es un puerto de salvaciori, un arca santa, y una poderosa fortaleza; aquí ·· nos defendemos con– tra el amor de las riq_ uezas, con la renunc(a éle to– da propiedad en comun y en particular: contrá los hechizos del deleite , con las maceraciones y ayunos continuados ; contra · los deseos de Ja carne, c"On lá continencia .pe~p.etua; contra la voluntad propia que á tantos ha extraviado y pe1"dido, con la sumisioa á la v@luntad de otros; cont-ra la ociosidad, en dic– támen de S. Gerónimo, ·madre de todos los vicios, y mad·rasta de todas las vi.rtudes·, con un encadenamien– to de trabaJos y buenas obras, que apenas dejan tiem– po vacío. Si, Señores : todos estos medios nos pro– porcionan armas; trincheras y baterías, corr que echa– remos por tiera los muros de la infernal Jericó; venceremos á los gigaAtes de Enáh, que son nues.:; tras pasiones ; cortaremos la cabeza al orgulloso oJo– fernes del amor propio; desquixararemos á los oso-S y leones d';! nuestros apetitos; y apagaremos el fue-"· -go, ·el irn petuoso fuego de la concupiscencia. SJ, hermanos mios , que ya l.os sois ; desde ahora lo diré para · vue_stro c'onsuel© y · el nuestro, por mas que el infier.n0 se empeñe en denigrar la humildad -de nuestro Instituto, la santidad y perfeccion de nuestra Evangélica Regla, la aspereza y rigor de nuestras sagradas constitucione¡, la austeridad de