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~ ·2'3 >-" amargas. Uoa confusa vocerfa es Ja seña para la última egecucion. Cielos piadosos ! : confortad mi espíritu , pues desfallece al solo contemplar la Jluvia infinita de füchas, lanzadas y IU3Chetazos que se descarga sobre aquellos ino· centes cuerpos ; al reparar como el c¡¡rmin p r ecioso de su sangre corre en arroyos por to:las partes tiñiendo aquel arenoso suelo ; al considerar las innumerables llagas y heri· das con que van desfigurándose , y recibiendo la muerte ~.!l todas y en cada una de las partes de sus miembros. Angel consolador ! : espirítos todos de la celestial Jerusa· len 1 : vosotrm que consolasteis á una Agar salvando á su hijo Hismael , para que no pereciese de sed ( 24) ; á un Tobías en Ja orilla del rio , para que no fuese devorado del pe~ ( 25).. •• volad presurosos á las riberas del Ca– roní, para librar á los siervos del Señor de los dientes no de monstruos acuáticos , sino de unos feroces raciona– les- que degradan á so especie : apartadlos: : : : pero no., pues que los pri variais del glorioso lauro que ha de co– ,ronar felizmente sus evangélicos trabajos : asistid si , sed espectador~s de Ja lucha de los que eo breve serán vues– tros compañeros en la gloria inmortal ; coofortadlos hasta el último momento ; enjugad sus copiosas gotas de sudor mortal ; sostened sus cuerpos ., que abrumados bajo eJ pe– sa de s11 dolor , se estremecen lidiando con Ja muerte, mientras aquellos sanguinarios satélites redoblan sos esfoei· ¡ms., vibran furiosamente las espadas y lanzas, muhipli– -ca11 Jos golpes , -aumentan las heridas penetrando basta lo .intime de las entrañas ; y haciendo volar al ayre coa fas gotas de su sangre los fragmentos de su carne. ¡ Oh.! ¡ cuán excesivo es el dolor., ia amargura y el tormento de nuestros PP. Misioneros I Allí el joven een el ancia– iio ., e! decrepite con el robusto , todos :van perdiendo ya -el uso de los sencidos , y cediendo á la violencia del do– lor : ya se asoman los tiltimos accidentes y convulsione¡ .morrales ; ya inclinan sobre el peclli) sus lánguidas cabe– zas ; ya con voces moribundas encomieadaB .á Dios Pa– <lre so espíritu ; ya cierran los ojos y les falta el alien· to.; sa exhalan el último .suspiro; ¡a : .:.: : OO.. mios ; ya.

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