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I7} delitos supuestos en irnos (1), ponderados otros, y lo que los siglos tenian cubier.to con su espeso velo, traído de nuevo á la noticia del público: ¿para qué? yo lo sé: muchos no lo ignoran: me contento con decir, para en-, tregar al ecl~siástico al charlatanismo. El dia tres de mayo de ochoci~ntos once, prind:., 'piaron los fuegos contra los regulares por la causa tan, ruidosa en esta ciudad de Fr. Diego Chacon. Júpiter tro- · nó desde su asiento , el congreso de los dioses enmude– ció , las bóvedas de los cielos resonaron al eco de su· voz. ¿ Quién 110 diria · que troya iba á arder ? Se pro– meten dQcumentos justificativos " despues de haber to- • mado por sí mismo las noticias mas autentic;as , y ha- ) liado un caso bárb.aro y atroz " ( 2 ). Se trata de un frai._ le emparedado, ¡qué·horror!.•. Nada de esto hubo: un· loco de doce años encerrado en un quarto algo in mua-– do : loco estaba por convencimiento de todos , loco era . y loco se quedó , vuelto otra vez á su encierro.· De na– da se habló en aquellos dias mas que del fraile empare– dado. Los fingidos castigos de los jesuitas, se queriaQ ver realizados de nuevo en el órden de Santo Domingo~ Todos clamaban venganza contra un hecho tau atroz: oí: decir: "me admiro haya aun geÚtes que confiesen con esos' padres, ni quien oiga sus misas." ¿Con qué se subsa... nará este mal?.... ¡ QuJntos escándalos hubo ! ¡ Quáhto padeció aquella religiosa comunidad ! Los resultado~ fueron favorables para 1os filósofos. Se sobreseyó en un asunt0, que rnda la pena debia recaer sobre qui_en lo suscitó. Los religiosos quedaron odiados , escandalizada la nacion, el. agente de este pleito victoreado por los anti-frailes y los rel igiosos cubiertos de de;honor. ¡Es– paiíoles, vuestros padres no eran así ! (1) L éase la f'astot .. del Sr. Obispo de Segovia. (2) Diar. de Cortes tom. 7.